El único inconveniente que tiene el pasado es que hay personas que no aprenden de él y siguen orgullosas de su, valga la redundancia, propio pasado, incuído los errores que han cometido. Esto hace que continúen con los mismos sinsabores, amarguras y desengaños habituales, incluso en su propia inconsciencia.
El pasado de cada cual retrata su naturaleza, su forma de ser, su personalidad, su modo de afrontar la vida, etc...
Es muy dificil que una persona cambie, y menos aún si se siente reafirmado en su buenhacer. Pero una cosa es cierta, haga bien o haga mal, todos tenemos nuestros compañeros de viaje, nuestras personas afines, para seguir en nuestra línea. Si no nos gusta esta línea debemos cambiar el modo de enfocar o de ver la vida y ésto no siempre es fácil y menos si no nos damos cuenta o no nos ayudan.
De ahí que hay un dicho muy manido que para mí encierra una gran verdad:
"Cada cual tiene lo que se merece."
Salvo muy raras excepciones añadiría yo.