Junto a Mata Hari fue uno de los espías históricos.
Además catalán, como Laporta.
Dice un conocido mío, muy bruto, (no amigo, digo conocido), que el amor lo inventaron los catalanes para no irse de putas.
Es un chiste fácil y no va con mi forma de ser.
Tengo muy buenos amigos catalanes y acostumbro a pasar los veranos en Cataluña. Nada más lejano al acierto, que catalogar a las gentes, con su ciudad, región o país de origen.
A mí los catalanes me caen genial, aunque sean espías. Y las catalanas ni te cuento.