NOS CREEMOS DUEÑOS DE LA
VERDAD...¡¡¡
Cuántas veces nos creemos
dueños de la verdad sentados sobre un pedestal de donde nadie nos pueda
bajar sin escuchar razones, con nuestro ego y nuestro falso orgullo seguros de
nosotros mismos, sin un ápice de humildad creyéndonos perfectos, poderosos,
semidioses viviendo en nuestro propio reino donde Dios no tiene cabida ni lugar,
mirando el pecado ajeno sin revisar nuestra conciencia incapaces de
perdonar....
A aquel que señalan con el
dedo a aquel que cayó en desgracia, a aquel que es motivo de escándalo,
aquel que hoy se arrastra por el fango a quien todos le dan la espalda de quien
todos como el árbol caído harán leña.
Pero ¿sabes que tu suerte un
día puede cambiar? ¿Que así como subiste puedes bajar?, y estarías en el
mismo lugarde aquel a quien desprecias de quien apartas tu vista para no
mancharte de quien hablas a hurtadillas de su mala fama.
Así podríamos estar
nosotros si alguna vez cometiésemos más de un error si nos dejáramos vencer por
el mal así nos habrán de crucificar haciéndonos a un lado en la más terrible
soledad.
Por eso no te escandalices de ese pobre pecador que al fin
todos somos iguales ante los ojos de Dios. Mañana podrías caer
tú, hoy caigo yo porque ¿Quién no ha sucumbido a una tentación? ¿Quién
más de una vez no tropezó?.
Dímelo ¿quién?. No seamos jueces,
ni verdugos
Que en nuestros labios y nuestros ojos siempre asomen la
misericordia y el perdón para ese hermano, ese amigo o enemigo para ese
prójimo que encontró la desdicha que en nuestro corazón solo viva, solo triunfe
el amor.
H.M.C.