El Atlético de Madrid engrandeció su figura en Europa conquistando ante el Fulham inglés (2-1) la primera edición de la UEFA Europa League en una final de infarto que de nuevo resolvió Forlán, dando a su equipo segundo entorchado continental que alimenta las vitrinas del Vicente Calderón tras la Recopa cosechada en 1962 y que abre el camino hacia un nuevo doblete.