Hoy quiero hablar de algunas cosas positivas que nos ha dejado este tiempo especialmente doloroso:
1.- Hoy volvimos a manejar con cortesía, nadie se mete en la línea, no se oyen maldiciones de carro a carro, nadie te critica si vas despacio, o no hiciste lo correcto, no se oyen bocinas con recordatorio maternales, respetamos mejor las reglas de tráfico, nos hemos vuelto más tolerantes, menos irritantes en las horas pico.
2.- Ahora volvieron los domingos familiares, comidas caseras con la familia extendida, llamamos más a los parientes lejanos y los que están fuera están más pendientes de los de aquí. Queremos saber si la tía está bien y si las primas traerán a los nuevos miembros para que juntos celebremos la vida.
3.- Por la noche cenamos juntos, nos recogemos temprano, nos desvelamos menos, nos sentimos más seguros en el hogar que en las calles.
4.- Las madres más despegadas están más pendientes de los jóvenes y ellos a su vez están más conectados con la actividad en casa.
5.- Los estudiantes se reúnen a estudiar y eso hacen. Temprano regresan a casa y permiten que los padres los recojan.
6.- Andamos más en grupos, somos más serviciales, nos agrupamos entre iguales, ya no más llaneros solitarios.
7.- Dejamos recados en el refrigerador de donde estamos con teléfono y dirección, conocemos más a los amigos de nuestros hijos, y permitimos menos que se queden fuera de casa.
8.- En fiestas de cumpleaños, gozamos los juegos de mesa y la bohemia con guitarras o karaokes.
9.- Le bajamos de volumen a los estéreos en las trocas con música de banda y narco-corridos y somos incapaces de molestar algún vecino por el volumen de la música.
10.- Si alguien no llega a tiempo a una cita lo buscamos y nos aseguramos de que esté bien. Hasta los doctores llaman a sus pacientes.
11.- Evitamos los anuncios luminosos y los grandes anuncios espectaculares y la música publicitaria estruendosa, así que le bajamos a la contaminación visual y auditiva.
12.- En los negocios de servicio, se redoblaron los esfuerzos para captar clientes y te atienden como rey en todas partes, en los bancos hasta te hacen buena cara, en los restaurantes se pulen mucho en el servicio y en el sazón, y que decir de los precios, hay promociones en todos los negocios que han sobrevivido y que compiten por pocos pero fieles usuarios.
13.- Todos cuidamos nuestros trabajos, bendecimos a nuestros empleadores y la calidad y la excelencia al fin tienen su justa dimensión.
14.- Las cosas cambian y nosotros también, las iglesias están llenas todos estamos buscando a Dios. Sabemos que necesitamos un milagro. Oramos más. Cuidamos todo, apreciamos lo que tenemos. Agradecemos cada día la vida y lloramos nuestras pérdidas. Y seguimos aquí, en esta tierra que bendecimos y amamos.