El Caballo Encantado.
Sulima y Abukimbad eran hijos del sultán y les gustaba mucho salir los días del mercado. Uno de esos días vieron a un mercader que maltrataba a un caballo blanco. El príncipe se lo recriminó, le recordó que estaba prohibido pegar a los animales y se lo compró para que no volviese a ocurrir.
Cuando salieron del mercado se encontraron a un viejo que les pidió algo de comer, se pararon y compartieron con el la comida que llevaban, al finalizar el les dio una vela mágica.
Los jóvenes estaban encantados con el caballo y le querían y cuidaban mucho.
Una noche encendieron la vela y el caballo se convirtió en príncipe, les explicó que era victima de un encantamiento y que sólo sería príncipe si le devolvían la vela y la conservaba en su poder. Los dos hermanos se la dieron inmediatamente y el se marchó muy agradecido a su reino.
Al poco tiempo volvió a pedir la mano de Sulima y se caso con ella.
(ANONIMO)