PASA LA VIDA
Cada día que amanece
es un regalo de Dios
nos trae una nueva sorpresa
que nos toca el corazón.
A veces con los quehaceres
que cada día nos llegan
no nos dejan ni pensar
nos envuelven, nos estresan...
¡Cuantas veces nos proponen
pasear, salir de compras
jugar al balón, ir al cine
o pasear tranquilamente
por los parques y jardines!
y enseguida contestamos:
no tengo tiempo, no puedo
tengo mil cosas que hacer
quedamos en otro momento
esque hoy no puede ser...
Pero el tiempo pasa y pasaa
no conoce sentimientos
no le importa si es verano
si es otoño o es invierno
lo suyo es seguir pasando
para el niño y para el viejo...
Pero a veces nos acurre
que llega a nuestra vida un premio
y se nos cruza una persona
con la que nos sentimos contentos
que nos llena el corazón
con su sonrisa y sus gestos
con sus palabras cercanas
con sus abrazos sinceros...
Y el tiempo corre que corre
que corto se pasa el tiempo
cuando estamos a su lado
tan a gusto, tan contentos...
y de repente nos dice:
Me voy que se acaba mi tiempo
me marcho a otro lugar
no puede estar más... ¡hasta luego!
Y nos quedamos muy tristes
por no aprovechar aquel tiempo
cuando a veces nos decía
¿tienes prisa? ¿vengo luego?
El tiempo ya se pasó
nos quedamos sin él, pero...
desde hoy miraré al reloj
con atención, con aprecio
y más de una vez diré...
¡voy a disfrutar mi tiempo!
(Es de mi autoría)