Lo más agradable de mi asistencia en  Madrid al curso de formación, no fue el curso en sí. Fue la oportunidad que tuve de conocer a Castañuela. Este grupo me ha llevado hasta ella y he conocido a una mujer guapa, muy guapa, para mí que esto es genético; con una vitalidad y dinamismo envidiable. Percibí en ella una generosidad abierta,  bondadosa y sospecho incluso que en ocasiones con un toque de ingenuidad,  similar a la mía.

Es una artista en potencia. Sobre todo en lo que a la copla se refiere.  Nada tiene que envidiar, por ejemplo,  a Isabel  Pantoja, o a otras de ese nivel si se sube a un escenario. Y sin subirse, si se tercia. Sin embargo la vida y sus circunstancias no le brindaron las facilidades necesarias. El destino es así de caprichoso, y la propia familia en ocasiones resulta un obstáculo y condiciona el futuro de uno. Creo que este es su gran orgullo y su gran herida.

Castañuela simplemente quería agradecerte públicamente, tus atenciones para conmigo durante mi estancia en Madrid, donde espero volver lo antes posible. Lo hago a través del grupo para que conozca el resto de amigos de Europa y América lo orgulloso que me siento de contar con tu amistad.

Muchos besos.