Buenas y calurosas tardes, Maite 998.
¿Es posible que en este momento, seis de la tarde, 32 grados
centígrados marquen los termómetros de Vigo y de Pontevedra,
36 los de Lugo, 29 los de A Coruña y 39,1 los de Ourense?
Entiendo yo que verano poco habitual es el de 2013 en Galicia.
Llama mucho la atención, a mí al menos me sorprende mucho, que
semejantes y extremadamente tan asfixiantes temperaturas se
registren en ese hermoso territorio del Noroeste.
Por infierno podemos entender condena, pena, castigo o pena. En
dos palabras, cosas malas que padecer.
No veo razón para que las buenas intenciones conduzcan a uno
hacia el infierno.
Ahora bien, si las buenas intenciones se transforman después en
actos delictivos que producen males y daños a seres y cosas, en-
tonces sin duda ninguna está trazada la vía hacia el averno.
Cordialmente.