Una enfermedad terrible necesita un rival a su altura. El cáncer ha podido encontrar la suya, al menos experimentalmente, con virus. Y en especial... el de la gripe. Sí porque lo último para parar el cáncer son virus que actúan como un caballo de Troya dentro de la enfermedad y logran vencerla.
Curar el cáncer es el sueño de muchos investigadores y en los últimos años se ha ido perfeccionando una técnica que podría revolucionar el tratamiento de esta enfermedad: la viroterapia, el uso de virus modificados genéticamente para que ataquen células tumorales.
La Fundación Instituto Leloir de Argentina anunció recientemente dos avances importantes en este campo. Junto con colegas de Chile, Reino Unido y Estados Unidos, lograron adaptar un virus que causa resfriados y conjuntivitis –el adenovirus- para atacar con éxito el cáncer de piel y páncreas en roedores.
El uso de virus para destruir tumores que se propagan rápidamente es un campo emergente en la terapia de cáncer.
Sin embargo, uno de los desafíos es lograr que los virus lleguen al interior del tumor para destruirlos. "El problema es la penetración", explica a la BBC la profesora Claire Lewis, de la Universidad de Sheffield. La investigadora dirige un equipo que utiliza glóbulos blancos como "caballos de Troya" para llevar a cabo el ataque viral. Ellos deben transportar los virus.
El director del equipo del Leloir, Osvaldo Podhajcer, jefe del Laboratorio de Terapia Molecular y Celular e Investigador Superior del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (Conicet), también han llevado a cabo este tipo de experimentos y lograron también eliminar los tumores sin dañar otros tejidos. Los científicos modificaron el ADN del virus para que sólo pudiera reproducirse en células cancerígenas.
La técnica representa un gran avance respecto a los tratamientos convencionales para el cáncer, como la quimioterapia o la radioterapia, que dejan graves secuelas. Además, el trabajo podría tener un enorme impacto en la cura del melanoma y el cáncer de páncreas, dos de las enfermedades más letales.Estos dos tipos de cáncer son los que tienen menos posibilidades de recibir un tratamiento no quirúrgico.
Cuando se habla de modificar genéticamente un virus hay quienes temen que estos avances científicos supongan un riesgo de pandemia. ¿Se acuerdan de Soy Leyenda con Will Smith? Los expertos eligieron el adenovirus porque se trata de un virus poco peligroso y muy estable, lo que descarta, en principio, cualquier peligro de mutación. El estudio fue publicado en la revista Molecular Therapy, de la Asociación Estadounidense de Terapias Celulares y Genéticas.
A pesar de la importancia de estos avances, los autores señalan que aún es prematuro establecer qué impacto real tendrán en la cura del cáncer. Primero, se deberá realizar toda la etapa de ensayos preclínicos y clínicos, es decir, un proceso que conlleva años y dinero. Al menos cinco años si todo va perfecto.
Si todo funciona bien, el Instituto Leloir estima que el tratamiento recién estaría disponible en unos cinco años. Sin embargo, los científicos tambien advierten que muchos hallazgos exitosos en roedores no funcionan luego en pruebas con humanos.
Estas dificultades podrían desalentar a quienes esperan ansiosos una cura para el cáncer, pero existe al menos un precedente que permite mantener la esperanza: en 2012 la Unión Europea permitió por primera vez el uso comercial de un tratamiento de viroterapia, algo que podría marcar el camino para los nuevos hallazgos