Recuperemos la Fe

La sencillez de ser amados por Dios

En estos días se está hablando de volver a las cosas sencillas de la vida.  La depresión económica ha sido profunda y afecta a gente de todas las profesiones y condiciones sociales.  Los trabajadores con carreras estables están preocupados por la seguridad del empleo.  Familias que vivían en casas grandes se encuentran ahora sin techo.

No todo el mundo está arruinado,  pero todos están a la expectativa.
Me afectará el desmoronamiento del mercado de alguna manera?

Hace pocos años, el "sueño americano" se había convertido en un sueño al que las personas se sentían con el derecho de alcanzar.  Millones de personas se endeudaron por más de lo que podían pagar, y ahora toda nuestra nación se ha quedado más atrás de lo que jamás pudimos imaginar.  Pero el declive financiero no es el peor problema.  Satiosfacer los deseos materiales a toda costa da como resultado un daño gigantezco, la pérdida de una genuina relación con nuestro Padre celestial.

Cuando somos atrapados en el proceso de nuestro propio avance individual y de creación de imperios personales, olvidamos la sencillez de ser amados por Dios. Nuestra fe se debilita cuando creemos la mentira del Enemigo, de que ya no necesitamos a Dios.  Pensamos erróneamente que podemos resolver nuestros problemas sin su ayuda o intervención.  Más horas de trabajo y un aumento en el límite de crédito, parecieron enseñarnos que éramos demasiado inteligentes para depender de Dios.  Pero, al final, esa filosofía no produjo los resultados esperados.

Podemos poner nuestra confianza en Dios, porque nada es demasiado difícil para Él (Pr 3.6; Jer 32.17).  Es posible que uste esté enfrentando una dificultad de su propia creación.  Sin embargom sepa esto: Dios nunca tuvo la intención de que usted enfrentará sus problemas solo.  Él es quien lleva sus cargas, y si usted acude a Dios, el Señor será su fortaleza en tiempos de dificultad (Mt 11.28-30).

¿En quién o en qué está usted confiando hoy?  Si su fe está puesta en otra cosa que no sea Cristo -quien es inmutable en Su amor, infinito en poder y abundante en misericordia- usted está parado sobe un fundamento que se vendrá abajo.

Dr. Charles F. Stanley

Oh Señor Jehová! he aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti. Jer 32.17
Jeremías expresa la omnipotencia, omnisciendia y prodigios realizados por Dios. Confía en Dios no hay nada difícil ni imposible para Él.

Dios sea propicio a ti hoy y siempre,

Perla