Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Amigos de Gabito
¡ Feliz Cumpleaños tessy !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños NicaNikita !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 "Reglamento del Grupo" 
 " General " 
 " Poemas " 
 "Administración" 
 " Comparte Ayuda " 
 Sugerencias ,Quejas , Comentarios 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 ►► Paneles todo PSP 
 Tutoriales aprendizaje 
 ►► Materiales 
 ►► Todo para Fondos 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 Ofrecimientos y entregas 
 " Buzones " 
 Comunidades Amigas 
 Responder Mensajes 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 
 
  Herramientas
 
General: AMORES VIRTUALES
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 4 en el tema 
De: dollys  (Mensaje original) Enviado: 15/07/2009 22:09
 

 

 

Cuando creamos vínculos electrónicos de carácter particular con desconocidos distantes, nada más hacemos que un simple ejercicio de retórica, pues en realidad no somos más que una hipótesis, el prólogo de nosotros mismos, el preámbulo de la realidad tangible.

Nacemos, crecemos y vivimos el uno sin el otro, y nos guste o no, así es y será. Por eso, aunque permitamos que la esperanza viaje libremente por los canales electrónicos, en las relaciones virtuales siempre debemos ser prudentes, pragmáticos y exigentes.


En la red debemos exigir el pasto cortado, las hormigas catalogadas, los árboles centenarios, el derecho de poder deshojar los pétalos de Internet uno a uno, letra por letra, sin el riesgo de que seamos engañados por el primer impostor disfrazado de Apolo o de Venus que nos diga ¡hola! desde el otro lado de la pantalla.

Usando el teclado como aguja y las palabras como hilo, debemos bordar una autopista cibernética sin esquinas ni atajos, que nos conduzca a un puerto marítimo cuyo cielo esté repleto de gritos de alegría y navegado por gaviotas idílicas, y en el cuál podamos amarrar y escribir sin recelo nuestra dirección electrónica, y aceptar sin temor la invitación de nuestra imaginación para tomar un aperitivo hecho de vino lleno de preguntas y de distancia hueca de respuestas.

Está determinado en el guión de la opereta internáutica que somos los actores principales y los únicos espectadores del juego del hagamos-de-cuenta.

Cada uno en su lecho y cada cama en su mundo, y en el medio la certeza de que en uno de los lechos habitará una presencia eléctrica y desamparada, y en el otro un perfume ecléctico y solitario, y en ambos, una perplejidad hermafrodita agonizando de tanto esperar, cansada de saber que nunca se transformará en realidad.

Imposible es el apodo, el nombre y el apellido del juego virtual, que se vale de la impunidad como bastón para mantenernos erectos dentro de esa red de punto de cruz en la cual los vacíos importan más que sus propios límites.

Nuestros papeles en la trama están más que bien delineados. Somos fotógrafos de ilusiones descartables, fabricantes de esperanzas infundadas, prestidigitadores de emociones tridimensionales, ventrílocuos de frases hechas, vendedores de sueños portátiles, mercaderes de falsas realidades.

Sí, Realidad: esa es la materia prima que en el territorio del idilio virtual se desconoce por completo. Y sin ella los sexos no se tocan ni los ojos se dilatan ni la piel responde a la caricia ni la boca tiembla mientras espera el beso.

Ese es el territorio que compartimos en este micromundo de impulsos eléctricos, y es fundamental que conozcamos el ámbito de la fantasía, así como sus fronteras inviolables, pues apenas dentro de ellas podremos cristalizar la imagen del otro, sus gestos y sabores, sus juramentos y promesas.

Nada más debemos esperar ni proponer. Nada, nada más. Que no es poco, ni es todo. Es tan sólo el mundo del tal vez, en la galaxia del casi, en el universo del más o menos.

Alejarse de ese principio es una invitación para el tropezón en la cáscara de banana que la virtualidad arroja a nuestros pies, pero - he aquí el gran PERO si conociendo los peligros aún así intentamos transformar electricidad en realidad, aceptando el riesgo como quien juega en la Bolsa de Valores, debemos saber que los dolores del tropiezo virtual serán muy pero que muy reales, y que ante la falta de un botón mental para borrarlos de nuestra memoria, apenas el Tiempo, en su caminar vagarosamente exasperante, podrá eliminarlos de la Base de Datos de nuestro registro sensitivo.

Esas son las reglas del juego y sus alternativas. Que cada uno elija su camino y asuma las consecuencias de su opción.


Lila Bonet

Dolly

 

                                                                                                                                                

                                                                                                                                                         

 

barra123.gif picture by MaryElUlYo

 
BYDolly


Primer  Anterior  2 a 4 de 4  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 4 en el tema 
De: SHOLITALINDA Enviado: 15/07/2009 22:14
Floresparati.1.gif Flores para ti.1 picture by mtas1963
 
 
ME PARECE UN ARTICULO
MUY INTERESANTE
PARA DIFUNDIR
ME LO PRESTO PARA ENVIARLO
A TODOS MIS CONTACTOS
GRACIAS

Respuesta  Mensaje 3 de 4 en el tema 
De: GRACIELALL Enviado: 16/07/2009 03:49
GENIAL!! ME ENCANTO
 
CON TU PERMISO ME LO LLEVO A MI GRUPO
 
por supuesto respetando autoria y lugar de procedencia
si no estas de acuerdo, por favor me lo comunicas y lo retiro inmediatamente
Disculpa mi audacia pero me encanto! Esta tan bien redactado con las palabras tan cuidadas y una expresion sin igual, que me atrapo!
Felicitaciones por tan buen trabajo Dollys
 


Respuesta  Mensaje 4 de 4 en el tema 
De: dollys Enviado: 16/07/2009 05:51
HOLA!!!
PUEDEN LLEVARLO AMIGAS
 
DOLLY


Primer  Anterior  2 a 4 de 4  Siguiente   Último  
Tema anterior  Tema siguiente
 
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados