Pétalos de Paz

Sílvia Schmidt

 

C a l m a ...
D i o s   a ú n   e s t á   e n   e l   C i e l o.

Tú no tienes por qué hacerlo todo solo y en este preciso instante.

 

Acuérdate de un momento feliz y tranquilo en tu pasado.
Reposa allá.

 

Cada momento tiene riquezas con vida permanente.
Corrige tu camino.

 

Cuando alguien te presione,
no hay problema en decirle que eso te disgusta.

 

Recuerda que no todo puede tener garantía.
Eso también te incluye.

 

Mira el correr de las aguas, el crecimiento del maíz,
el flotar de las hojas, el vuelo de los pajaritos.
C a l m a .

 

Saborea tu alimento.
Dios te lo dió para placer y nutrición.

 

Deja de planear como usarás lo que sabes,
lo que aprendes o lo que posees.
Son regalos de Dios en el momento correcto.
Solamente agradece y en la hora precisa tu propósito quedará claro.
C a l m a

 

Cuando hables con alguien no pienses en lo que va a decir:
Los pensamientos se verbalizarán naturalmente si los dejas libres.

 

Habla y juega con los niños.
Eso despertará al pequeñín sin prisa que existe dentro de ti.

 

Crea un espacio en tu casa, en tu trabajo, en tu corazón.
En ese lugar relájate y entrégate a los buenos recuerdos.
Te lo mereces.

Descansa sin preocupaciones y sin culpas.
Es una necesidad de tu alma.

 

Habla despacio .. Habla menos ... No hables ...
La comunicación más importante no es medida por palabras.

 

Oye la canción de un pajarillo ... toda la canción ...
La música y la Naturaleza son regalos, si,
pero solo si estás dispuesto a recibirlos.

 

Reserva un tiempo para reflexionar.
La acción es buena y necesaria, pero da buenos frutos
solo si antes meditamos y ponderamos.
C a l m a .

 

Crea tiempo para hacer lo que te gusta y jugar.
Sea cual sea tu edad, tu niño interior necesita divertirse.

 

Mira y escucha el cielo nocturno... Él habla.
Oye las palabras que tú dices, especialmente en oraciones.

 

Aprende a quedarte atrás y a dejar que otros ocupen el liderazgo.
Siempre habrá nuevas oportunidades para que tú vayas otra vez al frente.
C a l m a .

 

Divide grandes trabajos en pequeñas tareas:
Si a Dios le tomó 6 días crear el Mundo,
¿ Acaso tú puedes pretender ser mejor ?.

 

Cuando te encuentres agobiado y ansioso, deténte.
Pregúntate a ti mismo:
" ¿ Por qué estoy agobiado y ansioso ? "
Las razones pueden perfeccionar tu auto-conocimiento.

 

Cría tiempo para leer buenos libros:
La lectura de buenos pensamientos alivia el malestar.

 

Direcciona tu vida con elecciones ricas en propósitos
y no en apresuramientos y eficiencias.
El mejor músico es aquél que toca con sentimiento
y no el que acaba primero de tocar.
C a l m a .

 

Acaricia una mascota:
Darás y recibirás un presente del  a h o r a .

 

Entrégate a los trabajos manuales: eso libera el alma.
C a l m a...

 

Quédate un poco en lo oscuro:
Eso te enseñará a ver mejor, oir, saborear y oler.

 

Baja volúmenes de sonidos e intensidad de luces.
Apaga máquinas y rehusa invitaciones de vez en cuando.
Lo menos puede muchas veces ser más.

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