“Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.”
El apartamiento con relación a Dios, es común a todos los hombres por eso dice; “cada cual se aparto por su camino”, este no es el camino de Dios, es el camino fabricado por cada uno de nosotros.
Dios parece guardar silencio ante muchas injusticias, no quiere esto decir que El o se haya pronunciado, sino que aun no es el momento de aplicar la sentencia.
San Pablo escribió; “Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; No hay quien entienda. No hay quien busque a Dios. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.”
Dios estaba en Cristo, cargando sobre él el pecado de todos nosotros, Y llevándole a la cruz a ocupar mi lugar. (Lugar de dolor y condenación)
Mira lo que escribió San Pedro: “Más, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día.
El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”.