El técnico de Paraguay (que es argentino) desarrolló una excelente estrategia que equilibró la balanza logrando el empate ante un equipo superior en figuras.
Pero lo realmente inaudito es que no sepan patear penales los jugadores de una selección con semejante Historia.
Por cierto, este fin de semana, la tristeza no fue solo argentina.
(Gran Papiyo)