Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

Amigos de Gabito
¡ Feliz Cumpleaños Ŀonely !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños Xx Spawn xX !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños Dresner !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños aletseselarom !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños moriajoan !                                                                                           ¡ Feliz Cumpleaños Mayi !
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 "Reglamento del Grupo" 
 " General " 
 " Poemas " 
 "Administración" 
 " Comparte Ayuda " 
 Sugerencias ,Quejas , Comentarios 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 ►► Paneles todo PSP 
 Tutoriales aprendizaje 
 ►► Materiales 
 ►► Todo para Fondos 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 Ofrecimientos y entregas 
 " Buzones " 
 Comunidades Amigas 
 Responder Mensajes 
 ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ▬ღ 
 
 
  Herramientas
 
General: ♠ MI ADOLESCENCIA ♠
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 2 en el tema 
De: MILI  (Mensaje original) Enviado: 31/07/2012 21:20

9-5.jpg

 

♠ MI ADOLESCENCIA ♠

 

En mi adolescencia comprendía muy poco el arte

de manejar las emociones no "deseadas" excepto

conquistándolas. A menudo identificaba la capacidad

 de negar y rechazar con la "fortaleza".

Recuerdo mis sentimientos de soledad, en ocasiones

muy dolorosos, y de deseo de alguien con quien

poder compartir ideas, intereses y sentimientos.

A los dieciséis años acepté la idea de que la soledad

era una debilidad y el deseo de intimidad con otra

persona representaba un fracaso de la independencia.

Esta idea no la tenía siempre, sino parte del tiempo,

 y cuando me venía a la mente no tenía respuesta al dolor,

 excepto poner en tensión mi cuerpo contra ella, limitar

 mi respiración, hacerme reproches a mí mismo y buscar

 distracciones. Intentaba convencerme a mí mismo

 de que no me importaba.

 De hecho, me recluí en la alienación como algo virtuoso.

No daba muchas oportunidades a la gente.

Me sentía diferente a todos y veía que esta diferencia

 era un abismo entre nosotros.

Me decía a mí mismo que tenía mis ideas y mis libros,

y que con eso era suficiente o debía serlo si confiaba

 lo suficiente en mí.

Si hubiese aceptado el carácter natural de mi deseo

 de contacto humano, habría buscado puentes

 de entendimiento entre los demás y yo.

Si me hubiese permitido sentir plenamente el dolor de mi aislamiento,
 sin reprochármelo, habría hecho amigos de ambos sexos; 
habría apreciado el interés y benevolencia que a menudo se me ofrecía.

Si me hubiese dado la libertad de atravesar las etapas normales
 del desarrollo adolescente y salir de la prisión de mi aislamiento,
 no me habría preparado para un matrimonio desafortunado. 
No habría sido tan vulnerable a la primera muchacha que parecía compartir
 verdaderamente mis intereses.

Sin duda existían "razones" que explicaban mis áreas de no aceptación 
de mí mismo, pero eso no importa ahora. Lo que sentía, era lo que sentía,
 tanto si lo aceptaba o no.

En algún lugar de mi mente, sabía que estaba condenando y rechazando 
una parte de mí mismo, la parte que deseaba compañía de otras personas.
 Estaba en una relación de rechazo a una parte de quien yo era. 
Por muchas otras áreas de confianza y felicidad que pude disfrutar, 
me estaba infligiendo una herida a mi autoestima.

Cuando más tarde aprendí a recuperar las partes de mí mismo negadas,
 aumentó mi autoestima.

 

 Nathaniel Branden

 


 

Imagen4_2x1.jpg


Primer  Anterior  2 a 2 de 2  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: ArOmA De mUjEr Enviado: 31/07/2012 23:21
Hola Mili amiga..

Cuando más tarde aprendí a recuperar las partes de mí mismo negadas,
aumentó mi autoestima.

 
 


 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados