Sí. Ya había visto a la Presidenta hablar sobre su reunión con FRANCISCO.
Su alusión a la Patria Grande, es sin duda, una buena señal.
Pero, francamente, en lo personal... el nuevo Papa no me inspira confianza.
Porque no es suficiente quedarse con lo que dice (pura retórica), sino por lo que hace.
Y si nos remitimos a lo que ha hecho a lo largo de su vida ... estamos en el horno.
Hay cosas que están muy claras :
Juan Pablo II era un conservador que atacó permanentemente a la Teología de la Liberación (la opción por los pobres). Benedicto XVI lo acompañó en ese propósito haciendo "un trabajo impecable" a lo largo de los dos papados.
Estos dos Papas se dedicaron a nombrar Cardenales conservadores para asegurarse que su línea ideológica se perpetuara en el tiempo.
Por ello, y aunque muchos deseábamos que en el último Cónclave se eligiera a un progresista, lo más lógico (por una cuestión matemática) era que ganaría un nuevo conservador, porque entre los ciento y pico de Cardenales que votaban, la mayoría eran conservadores.
Y ganó Bergoglio, un hombre que por acción u omisión fue cómplice de la Dictadura Militar, y que durante estos últimos diez años, se dedicó a fustigar al actual Gobierno kirchnerista (quién hizo más por los pobres que cualquier otro Gobierno en las últimas décadas) repitiendo el mismas falsas acusaciones del Poder Económico, de los Medios de desinformación y de la mediocre Oposición : "terminen con la soberbia, no sean corruptos, acaben con la crispación, permitan el diálogo ..."
Entonces, dados los antecedentes de este nuevo Papa, me resulta poco creíble que este señor tenga intenciones de limpiar al Vaticano de tanta podredumbre (escándalos financieros, pedofilia, muertes dudosas), y piense trabajar por una Iglesia pobre, para los pobres.
Me suena más a una burda maniobra para barrer toda la basura bajo la alfombra y seguir engañando a la gente, que a la voluntad de construir una nueva y verdadera Iglesia.
Solo Dios sabe que pasa por la cabeza de Bergoglio, y qué está ocurriendo en el Vaticano, puertas adentro, por estas horas.
Pero ya nos enteraremos. Es cuestión de tiempo.
(Gran Papiyo)