La noche del 31 de octubre, muchos autores consideran que era la festividad principal,
de los celtas. Era el momento en que los druitas recojian las bayas del muerdago
depositadoen los troncos y en las ramas de las encinas y robles. Esta noche era conocida como Nos Galan-gaeaf, noche de las calendas de invierno, ya que el aòo
celta se dividia en dos estaciones, la de invierno y la de verano. En la vispera del
primero de noviembre se encendian hogueras y a esta fiesta acudian todos los miembros del poblado y se celebraba una asamblea en la que intervenian tanto los hombres como las
mujeres . Se sacrificaban animales con el fin de aprovisionarse para el invierno
y era una de las pocas ocasiones en que los druitas tenian autorizacion
para comer carne de cerdo y beber vino en abundancia. Todos encendian velas y el sentimiento de proximidad con los difuntos era tal que cualquier ser vivo -se decia-
podia descender con ellos al mundo inferior. La creencia generalizada era que en la noche del 31 de octubre los muertos entraban
en comunicacion con los vivos en una especie de confusion cosmica, lo que ha
generado multitud de leyendas al respecto. Un eco desvaido de aquellas veladas, se encuentra actualmente en la famosa noche
de Halloween que se celebra aqui en estados Unidos. Aunque parezca lo contrario,
el Halloween no es una fiesta genuina de este pais (Estados Unidos).
La palabra Halloween es la forma moderna inglesa del antiguo All-hallow even.
Los primeros colonos ingleses e irlandeses que llegaron, trajeron sus tradiciones a su nueva patria, entre ellas la festividad del dia de la brujas, que se celebra
el 31 de octubre. Los hogares se adornan con calabazas vacias (con una vela encendida
en su interior) recortadas con formas de mostruos. Las personas se disfrazan y van de casa en casa pidiendo tributos gastronomicos
y amenazando con gastar alguna broma pesada, si no se atienden sus peticiones.
Desde luego esta infantil costumbre ha inspirado a la industria de Hollywood
a la hora de elaborar horripilantes productos. En 1978, John Carpenter realizo "La noche de Halloween" y tras ella vinieron secuelas
tan infames que han hecho creer a mas de uno que Halloween es sinonimo