Casi 4,3 millones de residentes en Escocia deciden este jueves en un reñido referendo si quieren que esa región británica sea un país independiente, lo que acabaría con el Reino Unido y podría abrir un proceso de cambios en Europa.
En un día nublado pero agradable, la afluencia a las urnas es constante desde la apertura y se espera una participación muy alta pues se ha registrado para votar el récord del 97 % por ciento del censo electoral escocés, entre ellos 109.000 adolescentes de 16 y 17 años que lo harán por primera vez.
La pregunta a consulta, consensuada entre Londres y Edimburgo y que debe marcarse en la papeleta con un "sí" o un "no", es: "¿Debería Escocia ser un país independiente?"
Los sondeos y las casas de apuestas auguran una ajustada victoria del "no" en el referendo por entre dos y cuatro puntos de diferencia, pero los indecisos -entre el 5 y el 10 % del censo- pueden inclinar la balanza.
El resultado se conocerá el viernes "a la hora del desayuno", según la Comisión Electoral escocesa, por lo que habrá que esperar para saber si Escocia rompe una unión que se remonta a 1707 y nace un nuevo Estado en el seno de Europa.
Ante los 2.608 colegios electorales de Escocia no se han reportado incidentes de momento.
Sí hay mucha animación, emoción y pasiones, sobre todo por parte de los secesionistas, los que hacen más ruido y los más dispuestos a explicar, arropados por banderas escocesas y con pancartas, que el futuro de Escocia "debe estar en manos de los escoceses".
Su apuesta es apoyada ante colegios como el de Lothian Chambers, en pleno centro de Edimburgo, por grupos de vascos, catalanes o sardos con banderas que se muestran favorables a un proceso de secesión que esperan pueda ser imitado en otras regiones de Europa.
"Esta es una gran oportunidad para que Escocia tome las riendas de su futuro", aseguró Christabel Barrowman, de 20 años, en el colegio electoral de Haddon's Court, en el centro de Edimburgo.
En ese mismo colegio Elise Theures, de 70 años y votante del Partido Conservador, señalaba no obstante que optó por el "no" porque "prefiero ser parte de una unidad más grande, la unidad nos da la fuerza", y que se considera escocesa "pero no nacionalista".
El recuento comienza esta noche, nada más cierren las urnastras quince horas de votación en los 32 distritos electorales escoceses e incluirá también el voto por correo, otro récord con 789.024 papeletas solicitadas.