A veces nuestros corazones pierden el camino de la paz y la alegría.
Es fácil verlos por ahí, cabizbajos, llenos de problemas, perdiendo la fe,
perdiendo la esperanza.
parecen haberse olvidado de Dios.
Por eso, cada año, la Navidad regresa a recordarnos el júbilo de ese Dios Niño ...
que vino a dar su vida por nosotros, a recordarnos la humildad de un Jesús
que quiso ser hijo de un carpintero y aprender de la vida de los pobres.
importante sobre todo que el amor al prójimo
sea nuestra meta absoluta.
Que nuestra próxima jornada de los siguientes 365 días
esté llena de caminos por recorrer
y de metas por alcanzar,
pero lo más importante es que atesoremos
las experiencias que nos permitieron crecer
este año que está por terminar.
y que nos hicieron mejores seres humanos
buen lunes





mis mejores deseos gran grupo