AMIGO MIO
Amigo mío, tengo tanta necesidad
de tu amistad. Tengo sed de un compañero que respete en mí, por encima de los
litigios de la razón, el peregrino de aquel fuego.
A veces tengo necesidad de gustar
por adelantado el calor prometido, y descansar, más allá de mí mismo, en esa
cita que será la nuestra.
Hallo la paz. Más allá de mis
palabras torpes, más allá de los razonamientos que me pueden engañar, tú
consideras en mí, simplemente al Hombre, tú honras en mí al embajador de
creencias, de costumbres, de amores particulares.
Si difiero de ti, lejos de
menoscabarte te engrandezco.
Me interrogas como se interroga
al viajero, yo, que como todos, experimento la necesidad de ser reconocido, me
siento puro en ti y voy hacia ti.
Tengo necesidad de ir allí donde
soy puro.
Jamás han sido mis fórmulas ni
mis andanzas las que te informaron acerca de lo que soy, sino que la aceptación
de quien soy te ha hecho necesariamente indulgente para con esas andanzas y esas
fórmulas.
Te estoy agradecido porque me
recibes tal como soy. ¿Qué he de hacer con un amigo que me juzga? Si todavía
combato, combatiré un poco por ti.
Tengo necesidad de ti.
Tengo necesidad de ayudarte a
vivir.
Antonie de Saint-Exupéry
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