Escape del Miedo

Lectura Proverbios 1:1-7

En nuestro mundo cada vez más peligroso, piensa en todo aquello a lo que tenemos que temer:
amenazas terroristas que no presagian nada bueno, tasas de criminalidad aterradoras, desastres
naturales cada vez mayores, crisis de energía aleccionadoras.... Dios.
Sí, Dios ¿Irónico, no es cierto que en un mundo lleno de cosas atemorizantes, la única fuente de
nuestro refugio y seguridad es también Aquél a quien nos manda temer?
Considera las palabras de Salomón: "En el temor del Señor hay confianza segura, y a los hijos
dará refugio" (Proverbios 14.26).  Luego considera el versículo que le sigue:
"El temor del Señor es fuente de vida"
Tratamos de evitar las cosas atemorizantes de la vida porque interrrumpen nuestra
paz.  Pero se nos dice que vayamos hacia el temor - el temor de Dios.  Para  aquéllos que
"Teméis al Señor... Él es vuestra ayuda y vuestro escudo (Sal 115.11)
Nuestra fe en Dios nos puede librar de los temores del mundo (Sal 23.4) - pero sólo porque nuestra
fe se apoya en un temor que es diferente al temor del mundo. Proverbios 29.25 dice,
"el temor al hombre es unb lazo, pero el que confía en el Señor estará seguro.

temer a Dios es percibir Su carácter de imponente.  cuando reconocemos Su grandeza y
confiamos en Él, ya no queremos pecar contra Él. Dios se convierte en nuestro rerfugio
de los temores de este mundo.  En Él encontramos paz.

J. David Branon

Los que teméis al Señor, confiad en el Señor;
Él es vuestra ayuda y vuestro escudo.
Salmo 2115:11

Padre, viene un nuevo año y es como entrar a lo desconocido
pero es tan hermoso contar contigo, porque eso nos da paz,
sabemos que si somos obedientes a Ti, a tus leyes, mandatos
decretos, si no descuidamos el tomar nuestro alimento diario
de Tu Palabra, ni el buscar Tu rostro cada día, si le permitimos
al dulce Espíritu Santo que nos guíe en nuestro caminar, entonces
Tu abrirás las ventanas de tus cielos y derramaras bendiciones
sobreabundantes, suplirás toda necesidad, en los tiempos
difíciles estaremos vigorosos y fortalecidos por Ti, no tememos
al mañana porque confiamos en Ti, que eres el Poderoso Dios de
los ejércitos de Israel, el Santo de Israel, el Dios de lo difícil y
de lo imposible, El Todopoderoso, Inmutable y soberano Dios
que siendo Tu nuestro escudo, ahi se apagarán los dardos de
fuego del maligno y ninguna arma forjada contra nosotros
prosperará, porque Fiel es Quien ha prometido que nunca nos
dejará ni nos desamparará. Bendito sea tu santo nombre,
En el nombre de Jesucristo de Nazareth. Amén