Esta noche voy a ser sincera.
Esta vez no hablaré con el corazón.
Esta vez oirás mi alma.
Te pido que me escuches,
te pido que me comprendas
y te pido perdón por el daño que pueda hacer.
Yo te busqué, lo sé.
Te supliqué que me acompañaras,
quería sentir tu calor en las noches frías,
esas noches largas y angustiosas
que me perseguían hora tras hora.
Quería sentir tu protección,
quería sentir tus caricias, tu dulzura...
Nadie como tú oiría mi silencio,
nadie como tú lo comprendería ni lo aceptaría.
Has sido mi fiel compañía
durante todo este tiempo,
aceptándome como soy, con defectos y virtudes
sin quererme nunca hacerme cambiar.
Has llorado conmigo lágrimas amargas
bebiéndolas dulcemente, una tras otra,
mientras me acunabas entre tus brazos.
Has compartido mis risas, mi alegría
haciéndome ver siempre, que aún en esos trances,
seguía viva sin tener nada que temer.
Pero esta noche voy a ser sincera...
y te voy a pedir que te alejes de mí.
Te pido no escuchar más tus susurros,
porque cada noche duelen más.
Te pido que me liberes de tus cadenas
porque cada día pesan más.
Te pido que me ayudes a ver más colores
en el arco iris de mi amanecer.
Te pido, mi querida amiga SOLEDAD
que me dejes ahora serte infiel.