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General: -EL EVANGELIO DE HOY LUNES 04 DE 2011.DIOS LOS BENDIGA ,FELIZ DIA
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De: hermes sarmiento  (Mensaje original) Enviado: 04/04/2011 01:16
 


El Evangelio de Hoy LUNES 04 DE ABRIL DE 2011.


Lunes de la Cuarta semana de Cuaresma.

¡Bienvenidos Hermanos y hermanas en Cristo Jesús!

Nos hemos reunido para leer la Palabra y alimentarnos de Cristo

que fortalece nuestra vida y nos compromete a vivir 

 y a llevar una vida Espiritual llena de amor y paz.

Con alegría leamos la palabra.  

Con alegría leamos la palabra.  

“Habla, Señor, que tu siervo escucha”.

“Señor, creo que en las Sagradas Escrituras que voy a leer

se contiene Tu Santa Palabra.Haz que la escuche con todo respeto y amor.

Ilumina mi mente para que por medio de ella yo conozca

Tu Santa voluntad, y mueve mi corazón para que yo cumpla con fidelidad

lo que Tú quieres de mí.Espíritu Santo, ilumina con Tu luz mi cabeza

y enciende mi corazón para que la palabra de Dios

pueda entrar y quedarse siempre en mí, para conocer por medio

de Tu Palabra, tu Divina Voluntad,lo que puedo y debo hacer,

lo que debo y puedo modificar,y que no depende de mi cambiar.

Como debo conducirme en los acontecimientos de la vida.

Señor, aquí tienes mi corazón abierto,

dispuesto a escuchar Tu Palabra con corazón sencillo

y con la voluntad decidida para obedecerle.

En Ti esta la luz y la salvación.

Amen y Amen

PRIMERA LECTURA.

Isaías 65,17-21

Así dice el Señor: "Mirad: yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva: de lo pasado no habrá recuerdo ni vendrá pensamiento, sino que habrá gozo y alegría perpetua por lo que voy a crear. Mirad: voy a transformar a Jerusalén en alegría, y a su pueblo en gozo; me alegraré de Jerusalén y me gozaré de mi pueblo, y ya no se oirán en ella gemidos ni llantos; ya no habrá allí niños malogrados ni adultos que no colmen sus años, pues será joven el que muera a los cien años, y el que no los alcance se tendrá por maldito. Construirán casas y las habitarán, plantarán viñas y comerán sus frutos."Palabra del Señor.

Meditación

Es éste uno de los temas preferidos por los profetas de la restauración de Israel y que llegará a ser clásico y casi tópico en la literatura apocalíptica, de la que tanto gustó el apóstol Juan. Casi diríamos que científicamente responde a las nuevas teorías evolucionistas, según las cuales nada se destruye ni nada se crea sino que todo se transforma. Sin duda que el autor estaba muy lejos de estas teorías, pero comprendió que bajo la acción salvífica de Yahvé, todo debía sufrir una auténtica metamorfosis. Él lo expresó con la imagen visible de unos cielos nuevos y tierra nueva. Nosotros hablamos de un nuevo orden valores. En el fondo todos pensamos lo mismo, aunque lo expresemos de forma distinta.
Ya hemos visto en otras ocasiones y permítasenos repetir una vez más la inseparable unión de la naturaleza, de la creación entera a los destinos del ser humano como dogma básico de toda la literatura bíblica. Nuestro profeta se sirve de este lenguaje como de consabida hipérbole para reflejar la nueva situación de los redimidos, de los salvados.
Nosotros sabemos que el día en que todos los humanos se relacionen según las exigencias de su personalidad humano-divina desaparecerá definitivamente del mundo presente el desorden, es decir, el pecado con todas sus consecuencias. Podremos decir de verdad que vivimos en una nueva creación; la que todos deseamos y esperamos al final de los tiempos presentes, cuando se inaugure definitivamente el triunfo de Cristo sobre todos sus enemigos, ya iniciado en
la Cruz.
El
resto de las imágenes son claramente anhelos elementales de un pueblo en formación que vive en estrechez. Ausencia de llantos y clamores, de toda clase de dolor, y una vida larga, lo suficiente como para poder disfrutar de las casas que ellos mismos edifiquen, de las viñas que ellos planten.
Ninguno morirá de niño ni vivirá menos de cien años. Es curioso este paso constante de las realidades terrenas a las mesiánicas y de éstas a las primeras. Es que a los hombres no puede hablarnos Dios si no es en nuestro propio lenguaje y de acuerdo con nuestras propias ilusiones. Aunque la realidad sea muy otra y la sobrepase abundantemente, sería imposible a ellos y a nosotros intentar comprenderlas fuera de nuestras propias experiencias.
Sigamos sirviéndonos de las imágenes poéticas, de las expresiones mitológicas y apocalípticas si con ellas podemos vislumbrar de algún modo la dicha y felicidad que Dios tiene reservada a cuantos confían en él. Sin olvidar, no obstante, que son eso, imágenes, y que la realidad ha de ser necesariamente muy distinta.

Salmo responsorial: 29

Te ensalzaré, Señor, porque me has librado y no has dejado que mis enemigos se rían de mí. Señor, sacaste mi vida del abismo, me hiciste revivir cuando bajaba a la fosa.
Tañed para el Señor, fieles suyos, dad gracias a su nombre santo; su cólera dura un instante; su bondad, de por vida; al atardecer nos visita el llanto; por la mañana, el júbilo.
Escucha, Señor, y ten piedad de mí; Señor, socórreme. Cambiaste mi luto en danzas. Señor, Dios mío, te daré gracias por siempre.

El Evangelio de hoy

Juan 4,43-54

En aquel tiempo, salió Jesús de Samaría para Galilea. Jesús mismo había hecho esta afirmación: "Un profeta no es estimado en su propia patria." Cuando llegó a Galilea, los galileos lo recibieron bien, porque habían visto todo lo que había hecho en Jerusalén durante la fiesta, pues también ellos habían ido a la fiesta.
Fue Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Había un funcionario real que tenía un hijo enfermo en Cafarnaún. Oyendo que Jesús había llegado de Judea a Galilea, fue a verle, y le pedía que bajase a curar a su hijo que estaba muriéndose. Jesús le dijo: "Como no veáis signos y prodigios, no creéis." El funcionario insiste: "Señor, baja antes de que se muera mi niño." Jesús le contesta: "Anda, tu hijo está curado." El hombre creyó en la palabra de Jesús y se puso en camino. Iba ya bajando, cuando sus criados vinieron a su encuentro diciéndole que su hijo estaba curado. Él les preguntó a qué hora había empezado la mejoría. Y le contestaron: "Hoy a la una lo dejó la fiebre." El padre cayó en la cuenta de que ésa era la hora cuando Jesús le había dicho: "Tu hijo está curado." Y creyó él con toda su familia. Este segundo signo lo hizo Jesús al llegar de Judea a Galilea.
Palabra del Señor.

Reflexión

El regreso de Jesús a su tierra está marcado por el crecimiento de la esperanza mesiánica, que para mucha gente consistía en una gran etapa de sanación, milagros y prodigios.
El centro del mensaje se ubica en las razones para creer expuestas en el texto. Mientras la muchedumbre espera señales maravillosas para convencerse de un nuevo proyecto de vida, un hombre al que el pueblo rechaza por ser funcionario de la corte imperial dominante, necesitado de misericordia busca a Jesús, escucha su palabra y cree. El favor de Dios no se hace esperar: su situación es transformada, y a ello sigue una conversión profunda, personal, familiar y comunitaria.
Es importante dar una mirada crítica a las razones que tenemos para creer en Dios y en su propuesta de vida. Nuestra fe no puede depender de acciones espectaculares ajenas al proceso de crecimiento personal y comunitario. Ella se debe sustentar en la Palabra de Dios y en la asimilación amorosa de los clamores con que nos encontramos a diario y que nos exigen conversiones profundas.

Creer la Palabra es como abrir ante nosotros una puerta que nos introduce en una realidad nueva. Permanecer en la Palabra, guardándola en el corazón, significa participar en la obra divina de la recreación, santificación y transfiguración del cosmos.

Jesús es la Palabra viva de Dios: sólo él puede dirigirnos esta Palabra eficaz. Y lo hace de modo sereno, común, pidiendo una fe desnuda, total. Asentir y caminar fiándose de él puede ser cuestión de vida o muerte: lo fue para aquel padre cansado que nos narra el Evangelio, que en respuesta a su ruego no recibió de Jesús un prodigio, sino una palabra de vida, y se fió con total abandono. Nada había cambiado en su existencia, pero en su corazón anidó la esperanza. En la noche del sufrimiento y de la prueba, la Palabra es lámpara para nuestros pasos. La Palabra se convierte también en oración repetida sin cesar hasta que encuentre la confirmación luminosa y potente: el Señor ha escuchado, el Señor ha hecho maravillas de gracia. Cristo Jesús es el Señor de la vida ahora y por toda la eternidad.
La fe se convierte en canto de gozo que se difunde hasta formar un coro de alabanza: “Proclamad conmigo la grandeza del Señor; ensalcemos juntos su nombre. Yo consulté al Señor y me respondió, me libró de todas mis ansias; contempladlo y quedaréis radiantes” (Sal 33,4-6).

Permite que el amor de Dios llene hoy tu  vida. Ábrele tu corazón.Como María, todo por Jesús y para Jesús.

Señor: hoy no te pido sanaciones físicas, mas bien te pido sanacion del alma, pues sanando mi alma lo demás vendrá por añadidura.Dame un corazón de carne y levántame de la muerte como levantaste al hijo del funcionario.

Jesús que viva esta cuaresma con alegría, con gozo y sobre todo con mucha fe .Que lleve a mis hermanos esa fe en ti  para que se conviertan y resuciten aquellos que estén muertos o moribundos por el pecado .Me acuesto con la certeza de que mañana se harán realidad las cosas que Tu sabes que me convienen y redundaran en mayor gloria para Ti y felicidad para mi.

“Señor Jesucristo, te necesito. Te abro la puerta de mi vida y te recibo como mi Señor y Salvador. Gracias por perdonar mis pecados. Toma el control del trono de mi vida. Hazme la clase de persona que quieres que sea.” Padre lleno de amor, tú que te complaces en la misericordia y no te dejas ganar en generosidad y compasión, perdona siempre nuestras faltas y todo aquello con lo que herimos a tus hijos alejándonos así de tu casa y de tu mesa, así, con la luz de tu Espíritu Santo reconoceremos que tu amor es más grande que nuestras faltas y volveremos a ti con un corazón contrito y humillado.  Gloria y alabanza a ti, Señor. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén,Y Amen

* Te agradecería compartieras con tus amigos esta reflexión.
Con el mayor de mis respetos. Saludos y Dios los Bendiga. *

GRACIAS POR TU AMISTAD

FELIZ DIA.

Hermes Sarmiento G

De Colombia

 Si deseas escribirme, hazlo a este correo.

Así, responderé oportunamente.

Gracias

Hermes281955@hotmail.com



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Respuesta  Mensaje 2 de 2 en el tema 
De: Taty Enviado: 04/04/2011 02:33





 
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