Uno busca la felicidad fuera de uno mismo, en las cosas, en la gente, en el dinero, en tantas y tantas cosas que están fuera de uno. Inclusive uno llega a decir “que no sería feliz sino las tuviera a tales cosas o no tuviera a tal persona” y uno se vuelve dependiente de todo y no se vuelve a sí mismo. Pero llega el día que uno emprende esa búsqueda interna , corta con todo lo que no desea, todo lo que le hace daño y tan solo quiere estar solo, independiente , consigo mismo, libre de todas las ataduras que el ser humano se impone, y al sentirse libre de todas estas ataduras y estar con uno mismo, uno descubre una sensación de alegría interior que no pude explicar, y se da cuenta que lo que tanto buscaba no estaba afuera, está dentro de uno mismo.
“Francisco Guayasamin”