Una noche de tormenta,
con más truenos de la cuenta,
nació la bruja Pimienta.
En un bosque tenebroso,
silencioso y horroroso;
con lobos, pero sin osos.
Era una noche sin luna,
más oscura que ninguna,
alrededor de la una.
La trajo ululando el viento.
No es cuento, que yo no miento;
ni miento ni me lo invento.