Francisco Pascasio Moreno
Francisco Pascasio Moreno, también conocido como el Perito Moreno, (Buenos Aires, 31 de mayo de 1852 - Buenos Aires 22 de noviembre de 1919), fue un científico, naturalista, conservacionista, político, botánico, explorador y geógrafo argentino.
Biografía
Trayectoria personal
Moreno nació en la ciudad de Buenos Aires en 1852. Es hijo de Francisco Facundo y de Juana Thwaites, una familia acomodada, tuvo tres hermanos menores y una hermana mayor. Su padre había estado exiliado en Uruguay durante el período de Juan Manuel de Rosas y su madre era hija de un oficial británico que había sido capturado en la invasión inglesa de 1807 y luego se radicó en la Argentina.
A partir de 1863 estudió en el Colegio San José (Padres Bayoneses) y desde 1866 en el Colegio de la Catedral al Norte. Desde pequeño mostró interés por la naturaleza. A los 12 años fundó, junto con sus hermanos, un museo de Historia Natural. A los 21 años es designado miembro de la Academia de Ciencias Exactas de Córdoba.
En 1885 contrae matrimonio con María Ana Varela, hija de Don Florencio Varela, y de esta unión nacen siete hijos tres de los cuales fallecen antes de cumplir los tres años de edad. En 1897, en unos de los viajes que realiza a Chile como Perito en Límites, cruza la cordillera de los Andes a lomo de mula acompañado por su esposa, y sus cuatro hijos, acompañados por el Dr. Clemente Onelli. En junio de 1897 queda viudo cuando fallece su esposa de fiebre tifoidea a los 29 años de edad.
Entre sus actividades menos conocidas está el haber sido Director a partir de 1885, de la explotación la Sociedad Exploradora de “Paramillos de Uspallata”, en la Provincia de Mendoza, siendo el responsable de la introducción al proyecto del Ingeniero Germán Ave Lallemant al que contrató como supervisor técnico para instalar grandes plantas de laboreo minero en la precordillera a 3.000 m.s.n.m. en las cercanías de la actual ciudad de Uspallata.
En 1899 viaja junto con sus hijos a Londres, por trámites relacionados al litigio limítrofe con Chile, y deja a sus hijos varones internados como pupilos en una escuela inglesa. En 1903,fallece uno de sus hijos. Ante tamaña desventura emprende un nuevo viaje a la patagonia para mitigar su pena.
En 1904 crea los comedores escolares donde, diariamente, se sirven 350 platos de sopa costeados por él. Para hacer frente a los gastos, vende las tierras que el gobierno argentino le otorgara como reconocimiento por su trabajo como perito de límites, porque adhiere a la coherencia de sus propias aseveraciones: "un niño con barriga vacía, no puede aprender a escribir la palabra pan".
En 1910 es nombrado diputado nacional. También asume la presidencia de la Sociedad Estímulo de Bellas Artes. El 4 de julio de 1912 constituye la Comisión Organizadora del Movimiento Scout en la Argentina, creando una institución que se denominará en sus primeros tiempos: “Asociación de Boy Scouts Argentinos";También en este año es nombrado vicepresidente del Consejo Nacional de Educación.
Muere en 1919, a los 67 años. Es enterrado en el cementerio de la Recoleta. En 1944, sus restos fueron trasladados a la Isla Centinela, en el lago Nahuel Huapi.
Viajes a la Patagonia
En 1873, emprende su primer viaje a la Patagonia, impulsado por un espíritu de aventura, el interés por aprender sobre la geología, la historia natural, la flora y fauna de la región. A su paso por la localidad de Carmen de Patagones, ya había recolectado numerosos cráneos, puntas de flechas, puntas de lanza y sílices tallados. Estos cráneos, dan origen a nuevos estudios antropológicos que fueron publicados en París por el profesor Brocca y despiertan interés de estudiar a las razas indígenas de América del Sur.
En julio de 1874, recibe el encargo del Ministro de Relaciones Exteriores de Argentina Dr. Tejedor, de investigar las inmediaciones de la bahía Santa Cruz. Moreno embarca en el bergantín “Rosales” para explorar dicha zona donde existía un asentamiento de colonos chilenos. A su regreso, viaja a Entre Ríos para comparar la formación terciaria de la Patagonia con la de las Barrancas del Paraná. Alentados por sus logros la Sociedad Científica Argentina y el gobierno de la Provincia de Buenos Aires le brindan apoyo financiero para realizar nuevos viajes a la Patagonia, recorrer territorio inexplorado y estudiar la cultura indígena.
En setiembre de 1875, comienza su expedición al sur. En Bahía Blanca estudia yacimientos fósiles relevados con anterioridad por Darwin. Sigue rumbo al sur, quería cruzar los Andes a través del lago Nahuel Huapi e intentar llegar a Chile por el paso “Pérez Rosales,” haciendo el camino inverso al de Guillermo Cox. Bordea el río Limay y se encuentra con el cacique Saihueque en la zona de Collón Cura, para solicitarle ayuda y permiso para encontrar el paso que lo conduzca a Chile. Sin embargo Saihueque y su consejo tribal molestos por acciones del gobierno le niegan el paso a Chile, por lo que Moreno recorre la zona de Pehuenia y el 22 de enero de 1876, a los 23 años de edad, es el primer hombre blanco que llega al lago Nahuel Huapi desde el océano Atlántico, allí iza la bandera argentina, y posteriormente emprende el regreso a Buenos Aires. En este recorrido Moreno se puso en contacto con las naciones indígenas de la Patagonia, recolectando valiosos datos y materiales sobre estas etnias indígenas. Moreno quedó muy impresionado por el drama de estos pueblos despojados de sus tierras ancestrales. Por ello trató de humanizar las relaciones entre el gobierno argentino y los pueblos indígenas, abogando por la entrega de tierras a los indígenas y el establecimiento de escuelas para sus hijos.
En Buenos Aires prepara una nueva expedición cuyo fin es reconocer el río Santa Cruz. En julio de 1876, el presidente Nicolás Avellaneda, le brinda su apoyo Moreno y le facilita un ayudante para relevar la cartografía y la topografía de dicha zona. La cuestión de límites con Chile preocupa a Moreno; especialmente que el tema fuera discutido por personas que no conocían la patagonia como para tener elementos de juicio precisos y fundamentados sobre los límites de la cordillera y la divisoria de las aguas.
En octubre de 1876 regresa a la Patagonia junto a Carlos Berg en la goleta “Santa Cruz” al mando del Comandante Luis Piedrabuena. La nave fondea en la desembocadura del río Chubut, donde Moreno recorre la colonia galesa obteniendo gran cantidad de fósiles marinos. Luego de tres meses, la nave zarpa nuevamente, llegando a la boca de río Santa Cruz el 21 de diciembre. El propósito es remontar el río y recorrerlo en toda su extensión, llegando hasta las nacientes del río Santa Cruz, el 15 de febrero de 1877, bautiza al lago que da origen al río con el nombre de lago Argentino y llega a estar muy cerca del imponente glaciar que luego fue designado en su honor, aunque sin llegar a verlo. En su contacto con los indígenas toma apuntes de su idioma, quiere escribir un diccionario tehuelche. En febrero, descubre y bautiza el lago San Martín, avista el lago Viedma y el cerro Chaltén, al que identifica erróneamente como un volcán y lo designa con el nombre de Fitz Roy. Esa expedicion la realizó junto al Grumete Abelardo Tiola.
En 1879 es jefe de una nueva expedición al Sur, para determinar los límites entre Chile y la Argentina. En 1881 la Sociedad Geográfica de Francia le otorga la medalla de oro. En 1896 ya es nombrado Perito. Dos años más tarde, el presidente de la Nación le encomienda la exploración de los territorios del sur y se lo designa Jefe de la Comisión Exploradora. El 1° de abril de 1879 acepta el encargo, solicitando, como única recompensa que todos los objetos coleccionados durante la expedición sean incorporados al Museo bajo su dirección. Estudia en su expedición los aspectos geológicos del trayecto desde puerto San Antonio a Nahuel Huapi, para la futura construcción de una línea férrea que, atraviese la Patagonia y una el Atlántico con el Pacífico. Esta es su segunda visita a Nahuel Huapi, y comienza a pensar en reservar esas tierras para la creación de un parque nacional. Avanzando a través de las tolderías, llega hasta un lago desconocido, al que bautiza Gutiérrez en memoria de su antiguo maestro. Es territorio mapuche, y los expedicionarios caen prisioneros de los indios, aunque logran huir durante la noche.
Por sus conocimientos de la región andina austral fue designado en 1902, Perito de la Comisión de Límites entre Argentina y Chile. El arbitraje le permite a la Argentina retener 1800 leguas cuadradas de tierras.
Sus viajes significaron descubrimientos geográficos de transcendencia, permitiéndole conocer, palmo a palmo, el suelo austral argentino y encarar, con acierto, la defensa de los derechos de Argentina, en la controversia de límites con Chile. Los datos que aportó abrieron nuevos horizontes a la antropología sudamericana y posibilitó que varios científicos europeos se abocaran a estudiar las razas originarias de América del Sur.
Institucionalización del Movimiento Scout en Argentina
En septiembre de 1911, Arturo Penny contactó al Dr. Francisco P. Moreno para introducir el Movimiento Scout en los colegios de Barracas. En tres meses, el Perito Moreno impulsa personalmente la constitución de la 3er Compañía de Scouts de Barracas (En el presente 3er Compañia Scout Coronel Pringles).
En 1912, surge la idea de crear una Asociación Nacional que institucionalice el ya numeroso movimiento de scouts en Argentina.
El 4 de julio de 1912, en la casa del Perito Moreno (en la calle Caseros 2841 de la ciudad de Buenos Aires), junto a otras personalidades destacadas resuelven constituir la Comisión Organizadora del Movimiento Scout en la Argentina, creando una institución que se denominó: “Asociación de Boy Scouts Argentinos”, siendo sus fines: ser un medio de estimular en la vida de niños y jóvenes de la República, el gusto por las excursiones al aire libre, la observación de la naturaleza, el culto del honor, la lealtad y la honradez, el dominio y respeto de sí mismo y de los demás, el amor al prójimo, a la familia a la patria y a la humanidad.
El primer Presidente es el Dr. Francisco P. Moreno, quien es sucedido en 1914 por el Teniente General Pablo Riccheri.
Perito en límites en el diferendo limítrofe con Chile
El tratado de límites entre Argentina y Chile de 1881 establecía como frontera entre la República de Chile y la República Argentina las cumbres que fueran divisorias de aguas, pero la demarcación efectiva de la frontera debió ser sometida en 1896 al laudo arbitral de la corona británica (en ese momento al mando de la reina Victoria), al existir diferencias de opinión entre los dos países en cuanto a la implementación de los términos del tratado en el terreno. A partir de 1896 Moreno se desempeñó como perito argentino en las cuestiones limítrofes con Chile. Moreno se concentró en la defensa de los intereses argentinos, especialmente teniendo en cuenta que el arbitraje de límites más reciente frente a Brasil había sido muy desfavorable. El diferendo abarcaba parte de la Patagonia, y disputas por la demarcación en Catamarca y la Punta de Atacama. En el análisis del tema Moreno se basó en el principio, entendido por Argentina1 , de la soberanía argentina sobre el Atlántico y de Chile sobre el Pacífico.
Por lo tanto la tarea consistía principalmente en trazar una línea fronteriza por las altas cumbres, estudiando el curso de los ríos en su escurrir hacia los océanos Atlántico y Pacífico. Para ser efectivo en la tarea era necesario conocer el terreno en detalle para poder tomar posiciones y hacer propuestas que se sustentaran en las características geográficas de cada tramo de la extensa frontera entre Chile y Argentina. Por su trabajo como perito, Moreno realiza a fines del siglo XIX numerosos viajes a Santiago de Chile.
En 1897 y 1898 Moreno viaja asiduamente entre Argentina y Chile, contribuyendo a hacer posible el encuentro que los presidentes Roca y Errázuriz mantienen el 15 de febrero de 1899 en el Estrecho de Magallanes. En un lapso relativamente breve Moreno reúne abundante información que significó el descubrimiento de numerosos lagos, ríos, canales, islas, cerros y cordones montañosos, que hasta ese entonces eran desconocidos. En pocos meses Moreno preparó su obra Frontera argentino-chilena, en la que exponía una síntesis de la geografía de las fronteras argentinas. La teoría de Moreno de que el límite con Chile debía ajustarse a la línea de las altas cumbres fue sustentada por un detallado estudio en el terreno de toda la región limítrofe. Además, Moreno aportó el testimonio de los indios de Nahuel pan, y de colonos galeses para retener la región de la Colonia 16 de octubre, y de un antiguo colaborador del Museo, Germán Koslowky, para que el valle de los Huemules, en las nacientes del río Aysén quedase en territorio argentino. En 1899 se trasladó a Londres, como asesor geógrafo del representante argentino. En 1900 mientras Moreno comparte el viaje de regreso en barco a la Argentina con Sir Thomas Holdich, el arbitro inglés; este le dijo "todo cuanto gane el pie argentino al oeste de la división continental se deberá enteramente a usted".
En 1901 Moreno acompaña al Comisionado del Tribunal Arbitral, Thomas Holdich, en el reconocimiento que se realiza desde el lago Lácar hasta el seno de la Última Esperanza. En abril de 1902 Moreno se reune con los galeses asentados en la zona de Esquel logrando que se pronuncien a favor de Argentina, manifestándose conformes con estar "bajo la bandera argentina". En mayo regresa a Londres junto al arbitro inglés. El 28 de mayo, en Santiago de Chile, representantes de Argentina y Chile firmaron un pacto de limitación de armamentos y aceptaron el arbitraje inglés. El arbitro era su Majestad Británica Eduardo VII, su representante ante los países en disputa, Sir Thomas Holdich. Vuelve Moreno a Inglaterra y regresa con Holdich en 1902 para participar de los trabajos de fijación de los hitos limítrofes de acuerdo con el laudo arbitral firmado en ese año por Eduardo VII de Inglaterra. El laudo arbitral significó que el país adquiriera 42.000 kilómetros cuadrados de territorio. Por sus trabajos de perito, la Royal Geographic Society le confirió la medalla del rey Jorge IV.