Al decir placer, nos referimos a la ausencia de dolor corporal y de confusion y agitación mental. Epicuro
Evita los placeres superficiales y pasajeros. Tu vida debe ser sencilla. Busca placeres tranquilos que te aporten paz espiritual. El verdadero placer es disciplinado y moderado.
No busques placeres superficiales, pasajeros y antinaturales.
Busca placeres estables y tranquilos que te proporcionen paz mental.
Procura que tu vida sea sencilla.
Intenta alcanzar la ataraxia, el equilibrio mental que proporciona tranquilidad mental y emocional.
Si te encuentras en una situación estresante, preguntate lo siguiente: “Merece la pena? Acaso la vida es solo esta febril competitividad impulsada por el estrés?”