Arden en mi memoria
los frutos nacarados de tu sinuosa belleza
la fulgurante tibieza de tus afroditas labios
el suspendido estambre de tu carne fresca y fogosa.
Ebrio de amor me bebo tu recuerdo sorbo a sorbo
aspirando del eco el insaciable bramido de tu éxtasis
heredando el mordisco de tus cuchillos dientes afilados
sobre mi candente cuello tortuga en sangre ardiendo.
Arde tu recuerdo en mi memoria
en la estratósfera amurallada de mis soledades
en el pérfil de tu bosquejo sobre el ocaso de mi tiempo
derramándose en sus difusas formas
como aguacero de gelatinas y de natas acumuladas.
Soy guerrero mítico amada mía...
buscándote con un puñal de estrellas y de besos
conquistador insaciable de los helechos de tu luna
forajido ¡relámpago! en el cause de tus venas.
¡Oh mis errores mujer...mis malditos errores!
rescoldo impúdico donde habita mi torpeza
preñado de hogueras con el evangelio a cuestas
¡me trago la tierra toda!
buscando tus labios rosa
con la brújula de mi boca.
Y asi camino...navego....vago por el mundo...
abrazando la imantada sombra de tu belleza rosa
arañándole a tu recuerdo el tiempo total de sus efluvios
repasando sus segundos sus minutos y sus horas.
Tiempo que me oxigena...
¡me da vida....me mata!
¡tiempo que fue tuyo....tuyo y mío!
¡mío y tuyo!
tiempo que hoy es mío....
mío solo....solo mío.
