FOTOS BUENÍSIMAS DE LA ASUNCION DE FRANCISCO
Los asistentes a la misa de inauguración del pontificado del Papa Francisco
Una plaza de San Pedro abarrotada esperaba la llegada del Papa Francisco, que no se ha hecho esperar. Montado en un papamóvil sin urna de cristal, una imagen que no se veía desde 1981, Jorge María Bergoglio ha recorrido la explanada del Vaticano en torno a las 9:00 horas, besando a alguno de los peregrinos más pequeños y saludando sin descanso a los miles de fieles que no han querido perderse este solemne inicio de su pontificado. Al final de la misa, Francisco ha saludado en el interior de la basílica de San Pedro a los representantes de las 132 delegaciones de países y organizaciones internacionales. Nuestro país ha estado representado por los Príncipes de Asturias, el presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, junto a su esposa, y los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo; Interior, Jorge Fernández Díaz y Justicia, Alberto Ruiz Gallardón.
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La plaza de San Pedro del Vaticano se llenó de fieles a primera hora de la mañana para asistir a la solemne misa de inicio de pontificado de Francisco. En los alrededores de la explanada vaticana se ha desplegado un intenso dispositivo policial, con miembros de la Policía, los Carabineros (Policía militarizada), la Guardia Fiscal y la Forestal.
Una impresionante vista del Vaticano minutos antes del comienzo de la misa inaugural del pontificado del papa Francisco, quien ha agradecido la presencia de los representantes de otras iglesias y comunidades eclesiales, así como de la comunidad judía.
A las 9:00 de la mañana el Papa ha recorrido la plaza de San Pedro montado en un papamóvil descubierto, algo que no se veía desde 1981 año en el que Juan Pablo se vio obligado a cubrir su vehículo tras el atentado de Ali Agca
Los Príncipes de Asturias junto a los Príncipes Holandeses, Guillermo y Máxima.
Esta es la cuarta visita de Don Felipe a la Santa Sede, la tercera en la que acude acompañado por doña Letizia y la primera en la que encabeza la delegación española en la entronización de un Papa, ya que fueron los Reyes quienes asistieron a las de Juan Pablo I y Juan Pablo II en 1978 y a la de Benedicto XVI en 2005.
Mientras que el príncipe Felipe ha lucido el uniforme de gran gala del Ejército de Tierra, el mismo que lució el día de su enlace, la princesa Letizia ha lucido un vestido negro con chaqueta a juego y una mantilla de encaje sobre la cabeza.
El príncipe Felipe y el príncipe Guillermo de Holanda, quien se convertirá en Rey el próximo 30 de abril tras la abdicación de su madre, la reina Beatriz, han estado conversando y bromeando minutos antes de comenzar la ceremonia de entronización del nuevo Pontífice.
Tras los Príncipes de Asturias, quienes estaban sentados al lado de los futuros reyes de Holanda en la fila 10, el resto de la representación española, entre los que se encontraban el presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, junto a su esposa, los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo; el de Interior, Jorge Fernández Díaz y el de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón.
El Papa Francisco, quien tras recorrer la plaza del Vaticano, ha vuelto a la sacristía al lado de la estatua de La Piedad de Miguel Ángel para colocarse los ornamentos litúrgicos, se ha mostrado muy cercano con los peregrinos.
Con una gran sonrisa en la cara, Francisco se ha dejado querer por los todos aquellos que se han acercado hasta la plaza de San Pedro, incluidos muchos niños, a los que el Papa ha llegado a saludar desde su papamóvil.
El espacio aéreo de Roma está cerrado desde las cinco de la madrugada (04.00 GMT) hasta las 16 horas local 15.00 GMT y la policía fluvial recorre el río Tíber, cercano al Vaticano. Los fieles han acudido a pie hasta la plaza desde la que serán testigos de la entrega del palio (estola) y el anillo del Pescador al papa Francisco.
La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quien almorzó ayer junto al Papa, no ha faltado a esta misa de entronización, en la que ha coincidido con la princesa Máxima, natural de Argentina y futura reina de Holanda.
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso
Los grandes Duques de Luxemburgo han acudido acompañados por su hijo, el príncipe Félix, quien este año contraerá matrimonio con Claire Lademacher. La Gran Duquesa María Teresa, al igual que la reina Paola, se ha decantado por una indumentaria blanca, un privilegio concedido a las reinas católicas y a las consortes de los monarcas católicos.
María Teresa de Luxemburgo y el príncipe Enrique, quiens han viajado hasta el Vaticano acompañados por el príncipe Félix, han seguido la misa del nuevo Papa desde los primeros bancos de la plaza de San Pedro.
El príncipe Alois de Liechtenstein y su esposa, y su esposa, la duquesa Sophie, descendiente directa del último Rey de Baviera, han estado sentado durante la misa de entronización al lado del príncipe Alberto de Mónaco y su esposa, la princesa Charlenne.
El Sumo Pontífice se ha dado un auténtico baño de masas a bordo de su jeep blanco descapotable, desde el que ha recibido el calor de sus fieles y del que no ha dudado en bajarse para saludar a un discapacitado.
El rey Alberto II y la reina Paola han acudido en representación de la Corona Belga. Todas las delegaciones extranjeras saludarán al Papa Francisco después de las ceremonias de inicio del pontificado en el interior de la basílica de San Pedro.
El príncipe Alberto de Mónaco y su esposa, la princesa Charlenne han seguido la celebración de la misa de entronización desde la primera fila, después de desear al Papa sus mejores deseos a través de un comunciado en el que podía leerse: "En la ocasión de la elección de Su Santidad, que nos alegra profundamente, la princesa (Charlene) y yo le expresamos nuestros deseos deferentes y fervientes de que su pontificado esté marcado por grandes satisfacciones y numerosos logros".
La canciller alemana Angela Merkel, quien deseó al papa Francisco salud y fuerza en este pontificado, saludando a la princesa Máxima de Holanda durante la ceremonia religiosa celebrada por el Papa Francisco en la plaza de San Pedro del Vaticano.
Antes de comenzar la misa de entronización, el Papa ha llevado a cabo una serie de ritos como son la imposición del palio, la entrega del anillo del Pescador y el rito de obediencia.
Los Príncipes de Asturias y los Príncipes de Orange dándose la paz.
El príncipe Felipe y la princesa Letizia saludando al príncipe Alberto y su esposa, la princesa Charlenne
La misa solemne de inicio del pontificado, la de la festividad de San José, patrón de la Iglesia, la ha oficiado el Papa Francisco y la han concelebrado todos los cardenales.
Los Príncipes de Asturias, quienes acudían a su primera entronización, saludando a los Reyes de Bélgica
El vicepresidente estadounidense, Joe Biden, es el primer vicepresidente católico de la historia de Estados Unidos, y por eso viajó el pasado domingo hasta Roma a bordo de del Boeing 757 AirForce two para estar presente en esta multitudinaria misa.
El Papa Francisco, que ha pronunciado la homilía en italiano, decidió que la comunión la impartirán 500 sacerdotes, quienes portando paraguas con los colores del Vaticano para protegerse del sol, se han repartido por la plaza de San Pedro para hacer entrega del cuerpo de Cristo.
A muchos kilómetros de Roma, centenares de fieles se han congregado en la Plaza de Mayo, frente a la Catedral Metropolitana de Buenos Aires, para escuchar las palabras de su compatriota, quien les ha dedicado estas palabras: "Gracias por haberse reunido a rezar, es tan lindo rezar, mirar hacia el cielo, mirar a nuestro corazón y saber que tenemos un padre bueno que es Dios, gracias por eso".
Un grupo de monjas venidas de diferentes partes del mundo no han dudado en fotografiar al Papa con sus telefónos móviles y sus cámaras cuando este se a acercado a saludar a los más de 200.000 peregrinos que han abarrotado la plaza del Vaticano.
Un ayudante del Vaticano repartiendo la comunión en los cálices.
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