Las manchas de la luna
A la bella y blanca luna
ama la perfida zorra'
la persigue tanto y tanto
que es la sombra de su sombra.
Tras su amada, hacia el ocaso,
va en carrera presurosa,
mas detienen su camino
anchos muros de altas olas.
Tras su amada hacia el oriente
va la zorra loca
y la mansion de la luna
con plantas agiles toca.
La blanca luna se elava,
la plena luna remonta
y a cogerla entre sus brazos
salta la perfida zorra.
Fue la luna inmaculada,
inmaculada y hermosa,
mas quedo manchada y triste
con los besos de la zorra
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