Tenemos una
vida nueva, tenemos una esperanza nueva, vale la pena jugarnos por esta
vida. Estamos llenos de su gloria, el poder de Dios esta en nosotros y
sabemos que tenemos la esperanza que el mundo no tiene.
Es por eso,es
que tenemos que vivir de acuerdo a esa vocación con la cual hemos sido
llamado. Tenemos que ser constantes, perseverantes y firmes en lo que
creemos. Los entusiasmos repentinos nos confunden. Tenemos que tener
estabilidad espiritual que es la base para que nuestra fe sea verdadera.
Nuestra fe,
debe estar fundada desde la cruz del calvario para que este fundada
sobre la roca que es Cristo. Es desde ahí que tenemos un encuentro
verdadero con la persona de nuestro Señor y salvador. porque hay
hermanos que han tenido un encuentro con la iglesia a la que asisten,
con la amistad de los hermanos, pero no con el autor de la vida, y esa
no es la verdadera fe. Por eso, nosotros debemos predicar a Cristo
resucitado, y para eso debemos haber tenido un encuentro personal con
Él.