Pagina principale  |  Contatto  

Indirizzo e-mail

Password

Registrati ora!

Hai dimenticato la password?

Amigosdeaquiydeallacompartiendo
 
Novità
  Partecipa ora
  Bacheche di messaggi 
  Galleria di immagini 
 File e documenti 
 Sondaggi e test 
  Lista dei Partecipanti
 General 
 ♥.·:*BIENVENIDO AL GRUPO*:·. ♥ 
  
 Presentate aqui 
  
 Cartelitos para responder 
 Dia de la semana 
  
 Amparito--clase psp 
 Tutoriales varios 
  
 Poemas 
 Reflexiones 
 Fondos listos 
 Retos 
 Hogar-Varios 
 Buzones personales ... 
  
 
 
  Strumenti
 
General: ♥**♥ Dolor ♥**♥
Scegli un’altra bacheca
Argomento precedente  Argomento successivo
Rispondi  Messaggio 1 di 4 di questo argomento 
Da: ◘ Sire ◘  (Messaggio originale) Inviato: 15/02/2017 20:51

 

 

 

Dolor



Hacia la madrugada

me despertó de un sueño dulce

un súbito dolor,

un estilete

en el tercer espacio intercostal derecho.


Fino, fino,

iba creciendo y en largos arcos se irradiaba.

Proyectaba raíces, que, invasoras,

se hincaban en la carne,

desviaban, crujiendo, los tendones,

perforaban, sin astillar, los obstinados huesos,

durísimos

y de él surgía todo un cielo de ramas

oscilantes y aéreas,

como un sauce juvenil bajo el viento,

ahora iluminado, ahora torvo,

según los galgos-nubes galopan sobre el campo

en la mañana primaveral.


Sí, sí, todo mi cuerpo era como un sauce abrileño,

como un sutil dibujo,

como un sauce temblón, todo delgada tracería,

largas ramas eléctricas,

que entrechocaban con descargas breves,

entrelazándose, disgregándose,

para fundirse en nódulos o abrirse

en abanico.


¡Ay!

Yo, acurrucado junto a mi dolor,

era igual que un niñito de seis años

que contemplara absorto

a su hermano menor, recién nacido,

y de pronto le viera

crecer, crecer, crecer,

hacerse adulto, crecer

y convertirse en un gigante,

crecer, pujar, y ser ya cual los montes,

pujar, pujar, y ser como la vía láctea,

pero de fuego,

crecer aún, aún,

ay, crecer siempre.

Y yo era un niño de seis años

acurrucado en sombra junto a un gigante cósmico.


Y fue como un incendio,

como si mis huesos ardieran,

como si la médula de mis huesos chorreara fundida,

como si mi conciencia se estuviera abrasando,

y abrasándose, aniquilándose,

aún incesantemente

se repusiera su materia combustible.


Fuera, había formas no ardientes,

lentas y sigilosas,

frías:

minutos, siglos, eras:

el tiempo.

Nada más: el tiempo frío, y junto a él un incendio

universal, inextinguible.


Y rodaba, rodaba el frío tiempo, el impiadoso tiempo

sin cesar,

mientras ardía con virutas de llamas,

con largas serpientes de azufre,

con terribles silbidos y crujidos,

siempre,

mi gran hoguera.

Ah, mi conciencia ardía en frenesí,

ardía en la noche,

soltando un río líquido y metálico

de fuego,

como los altos hornos

que no se apagan nunca,

nacidos para arder, para arder siempre.

 

 

Dámaso Alonso 

 

 

 

 



Primo  Precedente  2 a 4 di 4  Successivo   Ultimo  
Rispondi  Messaggio 2 di 4 di questo argomento 
Da: Taty Inviato: 16/02/2017 02:34

Rispondi  Messaggio 3 di 4 di questo argomento 
Da: Amparito 09 Inviato: 16/02/2017 11:40

Rispondi  Messaggio 4 di 4 di questo argomento 
Da: pupis Inviato: 20/02/2017 00:01
 photo VERDEMANZANA-yudith.jpg


Primo  Precedente  2 a 4 de 4  Successivo   Ultimo  
Argomento precedente  Argomento successivo
 
©2025 - Gabitos - Tutti i diritti riservati