MEJOR DAR QUE RECIBIR
¡Reparte a manos llenas!
Una palabra oportuna, una sonrisa, una actitud
animadora, un pensamiento generoso, y tu
corazón sentirá esta gran verdad:
¡Es mejor dar que recibir!
¿Nunca lo sentiste?, ¡Experiméntalo!
Ayuda a alguien sin esperar nada a cambio, y verás cómo
llegará a tus puertas, con las manos llenas de alegría,
la más grande felicidad que puedas experimentar
en la vida...
¡La felicidad de dar!
Uno puede ofrecerle sus ideas a otro como balas
o como semillas.
Puede dispararlas, o sembrarlas; pegarle en la
cabeza a la gente con ellas, o plantarlas
en sus corazones.
Las ideas usadas como balas matarán la inspiración
y neutralizarán la motivación. Usadas como semillas,
echarán raíces, crecerán y se volverán realidad en
las vidas de quienes fueron plantadas.
El único riesgo de usarlas como semillas es que una
vez que crecen y se convierten en parte de aquellos
en quienes fueron plantadas, es probable
que nunca te reconozcan el mérito
de haberlas ideado.
Pero quién está dispuesto a darlo todo, recogerá
una rica cosecha.
de la red