El lluvioso verano cuando no es exceso que genera en desgracia,
nos regala jardines, árboles y plantas en todo su esplendor...
No dejes en el olvido la terapéutica tarea de dedicar a tus plantas
al menos una hora a la semana. El contacto con la naturaleza
nos recuerda que estamos vivas y que tenemos mucho por disfrutar.
**Las macetas o jardineras de plástico no es conveniente usarlas
a pleno sol porque se recalientan mucho y podrían afectar a las raíces.
En las tiendas de segunda mano y en los rastrillos puedes encontrar tiestos baratos,
originales y con esa pátina del tiempo.
**Puedes instalar cestas colgantes y cultivar ahí especies creando una atmósfera tropical
**Las ventanas son ideales para cultivar flores olorosas y herbáceas aromáticas.
El perfume invadirá la casa, sobre todo si las jardineras en el alféizar están plantadas muy densas.
**No emplees tierra de jardín para las macetas porque contiene mucha arcilla,
se compacta, lleva hongos y malas hierbas. Compra substratos de calidad.
**Mezcla perlita con el sustrato que compres; proporcionará aireación y retención de
agua. Otro material muy bueno para mezclar en sustratos es la fibra de coco.
No olvides depositar en el fondo de la maceta o jardinera, sobre los agujeros,
grava, arcilla expandida, trozos de cerámica rota, etc.,
y así no se atascarán los agujeros de drenaje.
**En un espacio tan pequeño como es el de las macetas hay que prestar mucha más
atención al riego y al abonado que si estuviera plantada en tierra.
**En macetas de terracota o de barro se evapora más agua que una de plástico por lo que hay que regar más.
**El riego por goteo automático en macetas y jardineras es bueno, especialmente si vas a ausentarte.
**Para saber si hay que regar o no tus plantas en maceta,
introduce el dedo en la tierra y comprueba si está húmeda.
Existen en el mercado unos instrumentos medidores de
humedad que se clavan y dan una buena orientación.
**Las macetas pequeñas se riegan con más frecuencia que las grandes.
**El principal error en el cultivo en maceta es el exceso de riego que pudre las raíces.
**Una planta encharcada sácala de su maceta e intenta secar la tierra envolviendo
el cepellón con papel de cocina absorbente.
**Muchas plantas tienen una época de reposo en el año,
que puede ser el invierno, donde el
riego debe ser mínimo o nulo. Los Cactus y las Clivias
son dos ejemplos de plantas que no hay que regar en invierno
**Si hay viento caliente en verano, riega a diario las
macetas y jardineras debido a que se secan en pocas horas.
**Para macetas y jardineras puedes emplear fertilizantes líquidos cada 15 días desde
finales de invierno a principios de otoño, y el resto del año, una vez al mes,
y/o fertilizantes de lenta liberación (su efecto dura 3 meses).
La sobredosis causa más daño a las plantas que no fertilizar en absoluto.
**Cuando la tierra de las macetas está muy apelmazada, lo mejor es coger un tenedor y
remover la tierra. Con esta operación facilitarás la penetración
del agua de riego y las plantas se desarrollarán mejor.
**Una manera de oxigenar la tierra y aportarle nutrientes es echando una o dos lombrices en la maceta.
**Si tus plantas tiene manchas producidas por la cal del agua, frótalas con
un paño humedecido en vinagre y luego acláralas rápidamente
con agua mineral, agua destilada o de lluvia (no tienen cal).
**Retira flores a medida que se vayan marchitando y hojas secas.
Cada año o cada dos años, según la especie, cambia la maceta por otra un poco más grande.
**Si no cambiaste la tierra de la maceta en los dos últimos años, sustituye los primeros
centímetros de sustrato por uno nuevo. Esto es frecuente cuando
se trata de plantas muy grandes que no se trasplantan.