¡Qué forma tan difícil de amar!, tú, libre y soñador,
sin miedo a vivir y volar.
Yo, ejemplo de lo correcto,
en un mundo monótono de ojos vendados y alas partidas
estando en un mismo espacio,
dos formas de vida distintas.
Más es tan simple caer en el amor
miradas que desean y sonrisas que pretenden
¿qué nos obliga a voltear? el miedo a volar y soñar,
o el depender de alguien más.
He perdido mis miedos,
pero tú retador de temores,
tienes miedo a compartir ilusiones.
¡Que forma tan fácil de olvidar!
niño travieso con alma de hombre
mi mortal afición, peligrosa seducción,
volaste sin decirme tan siquiera adiós.
Duele verte persiguiendo otro cometa
son estos celos que no quiero que veas.
¡Qué fácil es volver a confiar!
es que yo, ¿ya te había dejado de amar?
Me sentí inmune a tu mirar que consume mi alma,
a tu voz que mi piel altera
y tu sonrisa que mi corazón ablanda
Pero tan sólo al estar a tu lado he recordado,
por qué te amaba tan perdidamente
¡qué fácil es perdonar cuando amas verdaderamente!
Desconozco el autor