Algunas veces pensé en no sonreír mucho a extraños,
y suspirar sólo cuando mire las estrellas.
Gritar sólo cuando me sienta desesperado,
cantar sólo cuando una canción sea suficiente,
cuando la melodía me lo ordene.
Algunas veces pensé en sonreír sólo al cielo.
Mirar fijamente sólo a la Luna cuando ésta no me vea.
Decir: -“te quiero”, sólo a mi familia o mis amigos.
Decir te amo sólo a Dios.
Dejar me corazón latir fuertemente,
cuando esté en peligro mi vida (no mi alma).
Alguna vez pensé a buscar amor en el mar,
en los libros, en las nubes, en el silencio de las rocas,
en el sabor de los atardeceres; rojos y siniestros; lentos y capaces.
No he decidido conocerte, tan sólo nos presentaron.
No he decidido hablarte, tan sólo tenía una duda.
No he decidido sonreírte, tan sólo sonreía al viento.
No he decidido excusarme, he decidido quererte.