Para mi la mejor hora para pasear a orillas del mar, es sobre las 8 de la mañana.
No tienes que ir esquivando bañistas.
A esa hora el mar huele a mar, y no a los bronceadores.
Aun hay huellas de gaviotas y algún que otro pájaro.
Las máquinas no han retirado aun los peces muertos en la orilla. Y en
invierno, las algas que la marea ha traido
El mar suele estar completamente en calma. Algunos dias, más bién
se diria que es un inmenso lago.
Si la temperatura lo permite, me gusta dejarme flotar sobre las olas,
entre dos azules. Las olas te mecen y al mismo tiempo es como si
te cantaran una nana.
Estas en otra dimensión, ajena a todo lo que no sean tus propios
sentidos,
y al mismo tiempo, una se dá cuenta de lo pequeña que es. De lo frágil
que se es. Es entonces cuando siento que puedo volar.
Me gusta la playa de Valencia, de fina arena dorada. Andar descalza
con las olas lamiéndome los pies. (También sirve para quitar las durezas
o callosidades de los pies, ja ja)
Me gusta el meditérraneo.
Cúanto lo hecho de menos.
¿Cúanto hay que dejar atrás para volar?
Gracias a tod@s por leerme.