Hoy, no sé qué plasmar,
ni siquiera sé con certeza...
lo que deseo transmitir,
ni que es lo que mi pluma dirá.
Sin razonar, deseo deshacerme un poco
de los mil pensamientos que en mi
luchan y a la vez se acoplan
con el torrente de mis sentimientos.
Hoy me siento confundida,
llena de temores, recuerdos,
sinsabores, alegrías, esperanzas,
anhelos, certezas e incertidumbres.
Son un abanico de emociones,
que tienden a amalgamarse
para disgregados terminar...
después de un categórico letargo.
La mente hace un balance,
el corazón hace otro,
y en el momento que riñen
precipitadamente se reconcilian.
Solo sé que es un camino yuxtapuesto
e improrrogable en el sendero de mi vida,
que solo confirma lo irresoluto...
de una existencia de contradicciones.
Cuestiono lo absurdo de hoy,
como lo inverosímil de ayer,
y solo acierto a pensar
que detrás de la fragmentación...
Vendrá la restauración
y sera cierto mi sino
mientras tanto hoy...
Solo sé que existo.