El 29 de junio del 2008 debute como abuela de mi hijo mayor despues de 7 años de matrimonio, ya se imaginan la alegria que nos causo y lo esperada que fue esta beba. Su nombre: Valeria, mi pequeña niña de ojos grandes. El 26 de julio del 2009, mi segundo hijo me hizo repetir la experiencia, ahora llego la pequeñita Valentina, que aun no cumple un mes,(en esas epoca escribi esta vivencia, hoy obviamete han crecido y sus edades son otras) pero que me robo el corazon por completo. Aun no conosco sus ojos, pues duerme la mayor parte del tiempo, pero seguramente son hermosisimos, igual que los de su vanidosa abuela. Pensando en ellas, en como me veo a futuro, analice que quiero y que no de mi nuevo papel de abuela. Primero, y antes que nada, esto se los he hecho saber a mis hijos, yo no quiero ser llamada abuelita. Las abuelitas (asi las ubico yo, aunque no siempre es asi) andan de baston, y aun algun dia yo lo use, mi corazon siempre sera joven. Yo sere eternamete la abuela. Tampoco quiero ser la abuela regañona, la que sólo vienen a visitar porque sus papás los traen a la fuerza, o porque no hay nadie más que los cuide. No quiero ser de esa clase de abuelas que se miran con miedo, como una especie de Godzila con faldas. Tampoco quiero ser de esas abuelas invisibles que nadie ve y que se quedan arrinconadas como un mueble viejo No quiero ser la abuela que las obligue a comer brócoli o hígado de res, ni a la que no le platiquen nada porque “estoy fuera de onda y no las voy a entender”. Más que su abuela quiero ser su amiga, apapacharlas, jugar con ellas, disfrutarlas, mimarlas y sobre todo, ganarme su confianza y su respeto. Quiero que me enseñen a jugar videojuegos, llevármelas a pasear, y tambien comer pizzas las 3 juntas desparramadas en el sofá viendo películas. Quiero que todos los días me saluden por el messenger cuando no estén en mi casa y me vean on-line a través de su computadora. Quiero, que si aún existe mi espacio, vean en que perdi o emplee el tiempo cuando tenia vista y se rían conmigo (no de mí). Y disfruten conmigo de mis paseos atraves de mis fotos, mis parrandas y mis fiestas en el rinconcito y en la radio. Que las conoscan a ustedes, mis amigas y tambien a mis amores de hoy, al fin que para ese tiempo quiza ya estaremos mas alla del bien y del mal. Quiero conocer a sus amigos y novios y platicar mucho con ellas, que me cuenten sus cosas y, si están interesadas, yo les contaré las experiencias que aun hoy sigo acumulando en mi memoria. Quiero que se acerquen a pedirme consejo, apoyo o por lo menos un beso y un abrazo. Quiero que no se escandalicen de mis loqueras de hoy, ni de las del mañana y sobre todo, quiero que sean como sus papás (mis hijos) de los que me siento tan orgullosa. Quiero verlas crecer, hacerse seres humanos de bien y que, si Dios lo permite, me traigan a conocer a mis bisnietos Quiero que en las navidades se sienten alrededor de mi mesa y se coman mi pavo al vino, mi ensalada dulce, mi ambigu de papa y zanahoria, mi horneado de cerdo made in Martha y que cada que tengan antojo vengan a mi casa y me pidan que les haga como buenas campechanas su frijol con puerco o una lasaña. Y que no esperen que me la pase sentada en la mecedora tejiéndoles chalecos porque no soy así, que no se escandalicen ni se avergüencen cuando sus amigos me vean en mis pantalones de mezclilla, en mis blusas de lycra muy pegadas y sexis ¡y sin canas! haciendo cosas que el resto de las abuelas quizá no haga. Y sobre todo, quiero que sus padres les enseñen lo que yo traté de enseñarles a ellos: Que la sangre es lo primero…que debemos apoyarnos unos a los otros, porque solo somos 4 Pachecos, 3 reinas y hasta hoy 2 princesitas, que debemos estar unidos porque la familia es LO MÁS IMPORTANTE DEL MUNDO. Tengan por seguro, que hoy a ustedes 2 mis niñas, y a los que en lo futuro lleguen, quiza fisicamente no pueda, pero en espiritu, ahi estare en primera fila, esperándolos con los brazos abiertos y con todo el amor del mundo. Y que los voy a adorar a todos por igual, porque tengo corazón de condominio. Quiero, simplemente, que sean felices, y poder ser yo parte de esa felicidad. Y como mi legado a ustedes mis niñas mayores, heredo esa foto, que mande a pintar con tanto amor, para que se encarguen en el futuro de mostrarla a sus hijos o a sus nietos o porque no, a sus bisnietos, para que conoscan a esta mujer que aun sin conocerlos los recibe y los ama, con el eterno amor de abuela. Un beso.
MARTHA.
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