ME ACEPTO, TAL CUAL SOY
Para aprender a amar a los demás empecé por amarme a mí misma,
a aceptar que soy como soy, y a confiar que mis decisiones son las
correctas.
Para ello me apoyo en mis aciertos, acepto el amor que se me da y acepto las críticas, porque soy una persona que siempre está
dispuesta a estar en este mundo y a aprender a vivir en él. Estoy
aquí por alguna razón y trato de ser coherente con mis propias
ideas y convicciones.
Mi corazón late cada día, y al abrir mis ojos sé que mi vida sigue,
que he de disfrutar de todas las cosas que el mundo me ofrece,y
que en recompensa yo también doy todo de mí para que otras
personas tomen confianza en si mismas y lleguen tan lejos como
yo he llegado.
Aceptarnos como somos involucra todo: la mente y cuerpo sin
importar nuestro aspecto, y es que sólo se crece aceptándonos
como personas. Cuando nos complace vernos en un espejo y
vernos tan felices desde nuestro interior, porque allí nace lo
que proyectamos al mundo.
Debo pensar que toda la creación está hecha para disfrutarla,
así será más fácil dejarme llevar por las maravillas, porque yo
me merezco lo mejor.
Incluso acepto los rechazos que antes tan mal me hacían. Ahora
los veo y reflexiono acerca de ellos, porque puede haber algo de
verdad en lo que se nos critica, y si soy capaz de no ofenderme,
escuchar y reflexionar sobre los rechazos que sufro es por la
gran confianza que tengo en mí misma: soy única, valiosa y
me amo como tal.
Si esperamos a ser personas perfectas para amarnos a tal como
somos, perderemos la vida entera. Ya somos personas
perfectas, aquí y ahora.
No quiero grandezas, no espero mucho y tampoco espero nada,
no soy tan buena persona, ni tampoco tan mala, soy una persona única. Con el tiempo se aprende que sólo queriéndonos a
nosotros mismos podemos llegar a ser vistos como perfectos
a los ojos de cualquier persona.
A lo largo de la vida se pasa por muchas etapas, y por cada una
de ellas caí y aprendí; sea cual sea el papel que debo desempeñar,
siempre lo haré con la mejor voluntad y amor que nace desde mi
interior. Hay que estar felices de quienes somos, no necesitamos
compararnos con nadie, no estoy en esta vida para vivir
amargadamente por no tener lo que otros tienen; soy feliz como
soy, no tengo que enfermar de agobio por ser mejor, porque así
tal como soy me gusto, para mí soy perfecta, debemos tener
una mente así, tener mente ganadora.
Todo lo que necesito es amarme hoy más que ayer y tratarme
como a un ser profundamente amado. Al quererme a mí
misma, floreceré con una belleza que apenas puedo comenzar
a vislumbrar, soy y seré mi mejor amiga.
Tú también puedes amarte tal como eres.
El amor es el alimento que necesitamos los seres humanos para
realizar nuestra grandeza.
Cuando aprendemos a amarnos más a nosotros mismos,
aprendemos también a amar más a todo el mundo.
Debemos aprender a ver el mundo con más amor.
De ese modo, nuestro entorno será de personas sanas de
espíritu, y estaremos contribuyendo a que el mundo sea
mucho mejor, porque como personas, también lo seremos.
Y así es y será, si empiezas amarte y que tu boca diga cada
mañana:
Me amo tal como soy,
me gusta todo lo que hago
y si a alguien no le agrada
yo no voy a renunciar a lo que ya soy:
ALGUIEN QUE SIENTE SEGURIDAD EN SI MISMO.
Shoshan