Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo;
le haré ayuda idónea para él. Jehová Dios formó, pues,
de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos,
y las trajo a Adán para que viese cómo las había de
llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales
vivientes, ese es su nombre. Y puso Adán nombre a
toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del
campo; mas para Adán no se halló ayuda idónea para él.
Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo
sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de
sus costillas, y cerró la carne en su lugar.
Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre,
hizo una mujer, y la trajo al hombre.
Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis
huesos y carne de mi carne; ésta será llamada
Varona, porque del varón fue tomada.
Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre,
y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
Y estaban ambos desnudos, Adán y su mujer,
y no se avergonzaban.
Génesis 2.18 al 25
Mujer DIOS te ama