EL ORIGEN DE LAS PIEDRAS

FREDDY CORTÉS FORERO (FRECO)

Me han preguntado hoy sobre el origen de las piedras. He tenido que consultar paciente y concienzudamente en libros que de viejos se desmoronaron en mis manos. Pero para fortuna de la humanidad y mía, poseo una excelente memoria y he logrado retener casi al pie de la letra su contenido:
Partían los historiadores desde el génesis de la Biblia —que por ser muy conocido, comentaré muy poco—. Dios creó al mundo y era tanta su sabiduría que incluso hizo al demonio. Satán era muy inteligente, de una belleza inigualable, muy simpático, agradable y convincente. Dios lo eligió su amigo y compañero permanente, hasta tal punto confiaba en él que incluso le permitió realizar obras creadoras en la tierra, claro que por más que porfiaba nunca llegó a igualar a su maestro. Prueba de ello está en la conocida historia de la creación de los murciélagos, a los que no les hizo ano, por lo que deben comer y regurgüitar sus heces por el mismo orificio.
Por tanta consideración hacia él, Satán se tornó presuntuoso y humillativo con los demás ángeles. Viendo esto el creador y queriendo vencer su vanidad hízole crecer en la frente un par de cuernos retorcidos, muy similares a los del antílope; una cola de asno y sus extremidades inferiores volvióselas cual las de un carnero.
Inimaginable fue la ira que surgió en don Sata cuando se vio transformado, había pasado de ser el bello a convertirse en el bufón de la Corte Celestial; ningún Ángel, Serafín, Querubín, Arcángel que lo viese podía contener la risa. El se sonrojaba y palidecía con tanta rapidez, ímpetu y fiereza que no tardaron en brotar de la punta de su cola chispas. Comenzó a idear la forma de vengarse.
Por ese entonces, Adán y Eva se paseaban por el Edén, ya correteando y jugando como niños, ya acariciando las flores y los animales, ya hundiéndose en las cristalinas aguas de pequeñas lagunas incrustadas en frondosas arboledas; en fin, todo era diversión y felicidad. Si bien es cierto que estos dos seres habían sido elaborados con materia diferente de la de los ángeles, Dios les había tomado gran cariño. Conocedor de ello, don Sata vio la oportunidad de la revancha, máxime teniendo en cuenta que surgió en él el más vil de los sentimientos, LA ENVIDIA.
El Creador nunca escrutó las mentes de su corte, pues confiaba ciegamente en ellos, razón por la cual no llegó a sospechar siquiera los planes de su amigo.
Lucifer bien enterado como estaba de la prohibición hecha por Dios a Adán y Eva, buscó el momento propicio para realizar sus planes. Inició por infiltrarse en el Edén a hurtadillas, ganándose la confianza de aquellos seres inocentes. Fíjense que inició por mostrarles los momentos pasionales de la repoducción animal. Entonces Adán miró a su compañera diferente y a ella le sucedió lo mismo, se veían con ojitos de ternero ahorcado y enrojecidos como los de marrana en celo. Y pasó lo inevitable: Adán saboreó y se deleitó con la manzana de Eva hasta donde le fue posible.
Todo habría quedado así, de no ser porque justo en ese momento el Todopoderoso entraba a recrearse con la belleza del paraíso. Se dirigió hasta un mullido cesped, se reclinó y alcanzó a arroparse con las nubes —que en ese entonces eran como de algodón y muy calientitas—. Repentinamente salieron Eva y Adán de entre un matorral ¡Con una cara de satisfacción y una sonrisa de oreja a oreja! De inmediato comprendió lo sucedido y montó en tal cólera que ganas no le faltaron de aplastarlos, al fin y al cabo habían sido hechos de barro. Así hubiese sucedido de no escuchar las estruendosas carcajadas de don Sata, que muerto de la risa, estaba tendido en el suelo pataleando y rascándose la barriga. Comprendió Dios al instante quien era el culpable y no teniendo más a la mano, comenzó a coger manotadas de nubes y a lanzarlas con tal furia y fuerza que en el desplazamiento se fundían hasta convertirse en piedras.
Es aquél el origen de las piedras y si consideran falto a la verdad, compárenlas con las nubes y podrán observar que sus formas se asemejan, claro que hay unas que son cascajo, esas fueron con las que dios le atinó al diablo, que de lo fuertemente arrojadas se desquebrajaron y otras se volvieron planas. Pero con las que el Creador erró, esas todavía parecen nubes.
Resumiendo un poco, más adelante los libros narraban como Dios lanzó a Adán y Eva del paraíso y para refrendar su falta, impúsoles a manera de castigo, el que para volver a él y a tener acceso a los beneficios del Edén, debían esforzarse, haciéndose necesario que superaran diferentes retos y evolucionar día a día, consiguiendo su sustento con el trabajo. Solo que la descendencia humana cambió la visión y a los retos les denomina "problemas" y se deja apabullar llenándose de temor, tristeza y desolación, hasta tanto comprenda que debe obrar con paciencia, tolerancia y esperanza, pues cada reto tiene la solución al lado.
En cuando a Lucifer, lo expulsó de su legión de ángeles, pero él no se fue solo y montó en una profunda y oscura caverna un lugarcito de mala muerte, con mucha diversión y desenfreno y para hacer aún más llamativo el sitio ordenó que las meseras usaran vestimentas ligeras, todas con minifalda de la colección "próximo a verano". Es por ello que muchos hombres prefieren pecar para irse para allá, dizque a disfrutar, pero aquí entre nos, lo que no saben es que se convierten en el centro de la diversión de los diablos, pues son los blancos favoritos en las competencias de tridentes.

® Freddy O. Cortés Forero