Yo tenía un amorcito
Que me dejó abandonada,
Y en mis horas de tristeza
Lo recuerdo con el alma.
Era un tigre para el tango
Y envidia del cabaret,
Pero un día, traicionero
Tras de otra se me fue.
Por qué me dejaste
Mi lindo Julián,
Tu nena se muere
De pena y afán.
En aquel cuartito
Nadie más entró
Y paso las noches
Llorando tu amor.
Amor que fingiste
Hasta que caí,
Con besos me hiciste
Llorar y reír.
Y desde aquel día
Mi lindo Julián,
No tengo alegría
Me muero de afán.
Negro,
Cómo extraño tus caricias,
Tus mimos y tus sonrisas.
Dame,
De nuevo tu corazón,
Y he de pagarte contenta
Con mil besos de pasión.
Negro,
Yo nunca podré olvidarte
Y siempre sabré esperarte.
Piensa,
En el nido abandonado
Un corazón destrozado
Sólo puede perdonar.
Yo tenía un amorcito
Que era envidia del Pigall,
Era un tigre para el tango
Y se llamaba Julián.
Pero un día, entusiasmado
Por una loca ilusión,
Dejó el nido abandonado
Destrozó mi corazón.
Letra : José Luis Panizza
Música : Edgardo Donato