Mucho se ha dicho sobre los problemas o beneficios de que un hombre conciba hijos en la vejez. Incluso recientes estudios hablan de mayores riesgos de que sus descendientes desarrollen autismo, esquizofrenia u otros desórdenes.
Un nuevo estudio acaba de identificar un posible beneficio: una mejor salud general. La investigación aparece en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Los hijos de hombres más viejos tendrían telómeros más largos. Estos son las puntas de los cromosomas que protegen el ADN codificante del genoma y han sido vinculados con varias enfermedades, incluso el cáncer, durante el envejecimiento.
Los telómeros más largos han sido asimismo relacionados con una mejor salud y mayor longevidad, aunque la relación causal entre estos y la salud es aún poco clara.
En el nuevo estudio, que analizó varias generaciones de filipinos, confirmó hallazgos previos de que los hijos de padres más viejos tienen telómeros más largos, extendiendo el hallazgo hasta los nietos.
Específicamente, la longitud de los telómeros de un individuo se incrementaba con la edad de su abuelo paterno en el momento del nacimiento de su padre, así como con la edad de su padre al nacer.
“El alargamiento de los telómeros predicho por cada año de retraso en la reproducción del abuelo o el padre es igual al acortamiento anual visto en mujeres de edad media y mayores en la muestra, señalando los potenciales impactos importantes en la salud y el ritmo de declinación senescente”, escribieron los autores.
“Este hallazgo sugiere un mecanismo por el cual los humanos podrían extender su funcionamiento en la medida en que la edad de reproducción sea retrasada en una familia”.
El estudio no clarifica lo relacionado con los hallazgos sobre problemas de salud en niños de padres que concibieron a edad tardía.