Todos los seres vivos pasan por distintas etapas de crecimiento ineludibles, para dar frutos sabrosos la planta debe pasar por una etapa de crecimiento hasta alcanzar una plena madurez y es imposible que una planta de frutos sin antes haber dado flor
Con el ser humano pasa lo mismo, desde el mismo instante en que nace va grabando en su subconsciente experiencias placenteras y/o dolorosas que mas tarde serán el bagaje en el que cimentaran su crecimiento y madurez
Por ser el único integrante del reino animal que posee discernimiento, al llegar a la adolescencia, que es una etapa “bisagra” entre la infancia y la madures, entran en un período de crítica y rebeldía, lo cual es muy bueno y necesario, porque deben cuestionar todas las experiencias adquiridas hasta ese momento para desechar aquellas que no les sirvan (según sea su estado de evolución como almas) y aprovechar en su madurez aquellas que si le sirvan para hacer su vida mas plena y fructífera, llegando a su ocaso con placidez
Pero muchos, en lugar de cuestionar esa circunstancias negativas y luego desecharlas se quedan con ellas a cuestas y (como una piedra en el zapato) cada vez les va produciendo mas irritación, por lo que en lugar de pasar esa etapa ineludible de rebeldía se quedan estancados en ella, a medida que pasan los años en lugar de superarla la incrementan y hasta se sienten orgullosos de ella, cuando en realidad es la causa de su inmadurez emocional y sus sinsabores
La usan como un pendón de batalla…. o como un ariete para arremeter contra todos, porque les es imposible darse cuenta de que los demás no son culpables de sus desdichas, que precisamente esa etapa de rebeldía en la que se quedaron estancados inútilmente sin superarla, que esa rebeldía mal ubicada en cuyo nombre cometieron un sin fin de errores, es la causa de todo lo que les sucede; y para superarlo deberán hacer ahora lo que no hicieron en su momento, desechar todo lo que les impide ser felices y vivir en paz, dejar de lado viejos rencores, enterrar los fantasmas de su muertos terrores para, aunque sea en sus últimos años, crecer emocionalmente y saborear los mejores frutos de una vida que haya valido la pena ser vivida
ASUMIR CONSECUENCIAS
Comencé este tema del crecimiento emocional con la rebeldía, porque es una de las barreras más comunes que impide a las personas madurar emocionalmente para superar esa importantísima etapa “bisagra” en donde se pone a prueba, no solo su capacidad de discernimiento, si que también esta en juego el resto de su vida, lo que haga en esa etapa determinará como será su vida adulta, si maduró correctamente, tendrá la capacidad de enfrentarse a todos los retos que la vida pone a diario, si no lo hizo…….. pues a llorar, que para eso se hizo el Muro de los Lamentos
Hay otras cosas que en esa etapa debe elaborar y discernir, por ejemplo el Hacerse Cargo, en donde priman dos aspectos vitales
Un aspecto es el tener que tomar decisiones; hasta ese momento era normal y lógico que las decisiones importantes en su vida las tomaran los mayores, para algunos (los mas rebeldes) esto era muy frustrante y por lo general nunca se sentían de acuerdo con esa decisiones de sus mayores, lo que normalmente los inducía a hacer lo contrario pero no porque estuvieran convencidos de que era lo mejor, sino solo por el hecho de hacer lo contrario
En cambio para otros era muy cómodo, no tenían que estresarse decidiendo y en última instancia siempre tendrían a quien echarle la culpa de sus desgracias, estos son los que ya siendo adultos siempre encontrarán alguien que decida por ellos, tanto en lo emocional como en el resto
¿Por qué? porque tienen grabado a fuego en su subconsciente esa forma de ser y su genio interior se encargará muy bien de cumplir el mandato subliminal que recibió durante años
El otro aspecto muchísimo más importante con esto del Hacerse Cargo es el de Asumir las consecuencias
Mientras era adolescente si cometía un error grave le daban una penitencia y solo tenía que esperar a que esta se acabe (lo cual no quiere decir que no pudiera seguir haciendo de las suyas) por lo tanto, en lugar de aprender a hacerse responsable de sus actos aprendía a esperar que cayeran en el olvido…. o que otro cargara con la culpa
Quien no superar esa etapa se queda estancado en ella, repitiendo una y otra y otra vez los mismos errores, pero lo grave es que esos errores van generando circunstancias cada vez más graves, se van enredando unas consecuencias con otras… ¡hasta que su vida llega a ser un castigo o un infierno!
Con amor y por Amor
Brujilda Lomas de Zamora Junio de 1998