¿Tienes miedo a cometer errores?, ¿Piensas que está mal equivocarse? Saber que los errores forman parte del aprendizaje y que es necesario cometerlos, te libera de la frustración y del miedo que sientes ante la idea de meter la pata. Es importante que comprendas que tienes derecho a equivocarte sin que ello implique frustración.
En el libro Ratones, dragones y seres humanos auténticos, (Ed. Albor-Cohs), un manual de entrenamiento para el comportamiento asertivo, sus autores aseguran que los seres humanos, por el mero hecho de serlo, tenemos derecho a hacer las cosas de manera imperfecta y a equivocarnos alguna vez. Como dice Woody Allen, "si no te equivocas de vez en cuando, quiere decir que no estás aprovechando todas tus oportunidades."
Algunas de las más conocidas obras de arte y de los más importantes descubrimientos científicos, han sido el fruto de un error. De la misma forma que un niño se cae muchas veces cuando aprende a caminar, los adultos nos equivocamos en la vida, para aprender las lecciones que necesitamos. Cometer errores, es una parte imprescindible del hecho de madurar, porque sin ellos, ¿cómo sabríamos manejarnos ante la duda y la indecisión? Gracias a los errores, la vida nos responde a muchas de nuestras preguntas y nos aclara los dilemas que nos preocupan. Después de habernos equivocado, la incertidumbre que antes sentíamos desaparece, provocando que desaparezca también nuestra inseguridad.
La única condición para ejercer tu derecho a cometer errores, es la de responsabilizarte de ellos. Las personas admiramos la valentía y la sinceridad en los demás, por ello, cuando alguien reconoce que ha cometido un error o se disculpa por haberse equivocado, es un signo de que esa persona es lo suficientemente madura, valiente y segura, para reconocer que es sencillamente humana, lo que también es digno de admiración. Según decía Ortega y Gasset, "El reconocimiento de un error, entraña una nueva verdad."
Sé consciente de que un error siempre se comete sin querer, si no fuera así, no sería un error, sino una acción realizada conscientemente, y eso es algo muy distinto. Por ello, es importante que te tomes los errores de los demás y los tuyos propios como lo que son, equivocaciones involuntarias. "El hombre inteligente aprende de sus errores, el sabio aprende de los errores de los demás." Arturo Adasme Vasques.
Las consecuencias que provoca una equivocación, son las que son, y has de aprender a verlas como simples hechos. Quizá no te gusten demasiado, podían haber sido distintas, pero así han ocurrido y el hecho de aceptarlas también te enseña. A veces, el miedo que sientes ante la idea de cometer errores, viene impuesto por los que te rodean, por la creencia general de que equivocarse es algo negativo. Aunque al principio no seas capaz de saber si tu error acabará provocando algo mucho mejor, es posible que a veces sea así, y entonces ya no estará tan mal visto, aunque siga siendo un error al fin y al cabo. El temor a equivocarte provoca miedo a tomar decisiones y cuando no te sientes capaz de tomar una decisión por ti mismo, te provoca una falta de acción o estancamiento, que sin duda terminará en frustración. Tu baremo es tu corazón. Hacer aquello que te hace feliz o estar allí donde te encuentres a gusto, nunca será un error. Lo único importante es vivir la alegría de hacer las cosas lo mejor posible.
Mar Cantero Sánchez