Lo destaca una investigación de científicos del CENPAT en la Comisión
Ballenera Internacional
El estudio poblacional realizado sobre la ballena Franca Austral, cuyo
nombre científico es Eubalaena Australis y que se congrega entre mayo y
diciembre para su reproducción en los golfos que rodean la Península Valdés y
zonas adyacentes, demuestra que el número de integrantes crece a un ritmo del 7
por ciento anual.
Enrique Crespo, investigador principal del CONICET en el Centro Nacional
Patagónico (CENPAT), quien presentó el estudio en la reunión del Comité
Científico durante el 65º encuentro de la Comisión Ballenera Internacional,
destaca que “en el pico de la temporada se han registrado más de 1250 ballenas
con lo cual la circulación total estaría cercana a los 2000 animales con unos
500 nacimientos”.
La investigación dirigida por Crespo y su equipo de trabajo comprenden el
monitoreo de la distribución, abundancia y tendencia poblacional de las
ballenas francas por medio de relevamientos aéreos que permiten una mayor
cobertura del área que abarca la costa de Chubut, desde la desembocadura del
Río Chubut hasta Puerto Lobos en el paralelo 42°. El equipo de investigación
lleva realizado desde el año 1999 hasta la fecha, 55 vuelos.
Según el investigador “las estimaciones de la abundancia de la especie de
interés y su tendencia en el tiempo, conforman la información de base con la
cual evaluar el estado de las poblaciones y constituyen una herramienta
indispensable para su manejo y conservación”.
El estudio pone de relieve de que las ballenas estarían expandiéndose hacia
otras áreas ocupadas en el pasado como el Golfo San Matías al norte de
Península Valdés y que las mortalidades más altas podrían alcanzar hasta el 20
por ciento de las crías nacidas, pero en años normales o de baja mortalidad no
alcanzarían el 10 por ciento.
Este trabajo se alinea además con los intereses que persigue la Comisión
Ballenera Internacional, en lo que hace a la regulación de la explotación y
conservación de estos cetáceos.