Buenas noches, Lucía de Colombia.
No son las palabras que has escrito un
trabalenguas, pero tienen un parecido
tan próximo con alguno de los que exis-
ten, que no debes ni debemos nadie sor-
prendernos si, al final, llegamos a una
situación de confusión y de falta de en-
Sabe, Lucía de las altas latitudes terres-
tres, que es un placer leerte.