Esta banda se había
especializado en apoderarse de tierras públicas en la Amazonía para quemarlas,
talarlas y transformarlas en pastizales, antes de ofrecerlas en venta con
documentación falsa a agricultores y criadores de ganado.
Una operación conjunta de
policías federales y fiscales forestales de Brasil desarticuló este miércoles
la que es considerada por las autoridades como la organización que más devasta
la Amazonía, con daños ambientales comprobados por 500 millones de reales (unos
227,3 millones de dólares), dijeron fuentes oficiales.
La operación fue ordenada por un
juez federal que investiga a la organización y que expidió órdenes de captura
contra 14 de sus supuestos integrantes en los estados de Sao Paulo, Pará, Mato
Grosso y Paraná, informó la Policía Federal en un comunicado.
Esta banda se había
especializado en apoderarse de tierras públicas en la Amazonía para quemarlas,
talarlas y transformarlas en pastizales, antes de ofrecerlas en venta con
documentación falsa a agricultores y criadores de ganado.
“Los involucrados son
considerados los mayores deforestadores de la Amazonía brasileña actualmente”,
aseguró la Policía Federal.
Entre las áreas invadidas y
devastadas por el grupo destaca la Floresta Nacional del Jamanxim, reserva
ambiental en jurisdicción de Novo Progresso, municipio del estado amazónico de
Pará.
La llamada Operación Castanheira,
bautizada con ese nombre en homenaje a un árbol protegido y que simboliza la
Amazonía en Brasil, movilizó a 96 agentes de la Policía Federal y 19 fiscales
del Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama).
Los integrantes del grupo
desarticulado serán acusados formalmente de los crímenes de invasión de tierras
públicas, hurto, crímenes ambientales, falsificación de documentos, asociación
para delinquir, evasión de impuestos y lavado de dinero.
Las penas previstas para estos
delitos pueden sumar hasta 50 años de reclusión.